En el ojo de la tormenta tras la grave denuncia que lo vincula con la extorsión a un empresario, Carlos Stornelli desmiente todo y asegura que sólo se trata de “una operación berreta” en su contra. Pero ahora habría salido a la luz una nueva y fuerte acusación: el fiscal de la causa de las fotocopias se habría chantajeado a sí mismo para aceptarse como arrepentido. Un análisis a fondo del caso del que todo el mundo habla, con la excepción de “Clarín”, “La Nación” e “Infobae”.

Una fuerte denuncia del periodista Horacio Verbitsky, documentada con audios, capturas de pantalla y videos, asegura que Marcelo D’Alessio, un allegado al fiscal Carlos Stornelli, le exigió el pago de 500 mil dólares al empresario Pedro Etchebest para no vincularlo con la causa de las fotocopias de los cuadernos Gloria.

El propio empresario extorsionado, que finalmente realizó un pago de 300 mil dólares y anotó el número de los billetes, se presentó ante la Justicia y aportó pruebas de su acusación. Stornelli y D’Alessio quedaron imputados en la causa. El caso salpica también al operador periodístico del Grupo Clarín, Daniel Santoro, a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y al “arrepentido” Leonardo Fariña, entre otros.

El escándalo parece no tener fin y ya se habla de él en todos lados, a excepción de las páginas de “Clarín”, “La Nación” e “Infobae”. Y no sólo eso: el asunto crece y el fiscal Stornelli estaría cada vez más complicado.

En las últimas horas, de hecho, se habría sumado una nueva y grave denuncia que afirma que Stornelli se habría extorsionado a sí mismo. De acuerdo con la nueva acusación, “el fiscal se pidió 500 mil dólares a sí mismo para aceptarse como arrepentido”.

“Está hasta las bolas, no lo va a poder ayudar ni su amigo Rafa Di Zeo”, afirman fuentes de Comodoro Py, que hacen hincapié en la estrecha “amistad” que uniría a Stornelli con uno de los líderes de la barrabrava de Boca Juniors.

El propio fiscal acusado de extorsionador salió a aclarar su situación y mediante cuatro frases concisas, precisas y coso destrozó la denuncia en su contra (ver aparte).

Asimismo, Stornelli salió a aclarar que se trata de “resistencias” de “algunos sectores” ante el avance de la causa de las fotocopias. “Hay muchos que no quieren que la investigación progrese, como dice mi amigo Daniel Santoro, a quien no conozco y sólo vi en 300 o 400 oportunidades”.