Silvia Pérez Cruz: “Yo canto canciones y emociones, la música es mi pasión”

“El periodismo siempre necesita buscar una definición –dice  la cantante catalana Silvia Pérez Cruz cuando se le pregunta si lo que hace puede definirse como música popular. “Yo, simplemente, me dedico a la música”. Este sábado 27 se presentará en La noche de la Feria. “Soy una amante de la música –continúa-y estudié clásico que era lo primero que se estudiaba en las escuelas, saxo, piano y solfeo para aprender el lenguaje musical. Pero como siempre cambiaba la música de las piezas que tocaba, alguien me dijo “pero si existe el jazz que te permite improvisar todo lo que quieras”.

-¿Y por qué cambiabas las melodías?

-Pues, porque me aburría mucho. Me gustaba cambiarlas. Luego conocí gente del flamenco, del pop, de todos los estilos y me he ido alimentando de todos ellos. Es verdad que me gusta mucho lo popular, las canciones muy sencillas que sobreviven a los tiempos. Eso quiere decir que están muy bien hechas y que son muy generosas porque permiten que tú puedas hacer arreglos muy personales. Cuando me preguntan qué hago, contesto: canto canciones y emociones; soy músico (y lo dice así, en género masculino) porque la música es mi pasión.

-Comenzaste aprendiendo instrumentos, ¿cómo llegaste a cantar?

-Mi madre canta. Mi padre cantaba y tocaba la guitarra. En casa la mejor manera de comunicarse era cantando. Para mí siempre fue algo muy natural. Todos pensaban que sería saxofonista, porque era lo que estudiaba, pero llegó un momento en que me di cuenta de que donde llegaba con la voz no llegaba con un instrumento. El canto es algo directo, no tengo que traducir mis sentimientos. Además, puedes poner palabras. La música sola puede llegar a cualquier sitio, pero si además de manejar ese lenguaje musical pones una palabra bien puesta, la sensación te colma. Todo instrumentista busca cantar con su instrumento, pero si puedes cantar con tu voz, es maravilloso porque el canto permite desnudarse.

-Leí que cantaste con diversos músicos, entre ellos con Joan Manuel Serrat.

-Sí. Yo había hecho una versión de una canción suya en catalán en un disco. Además me escuchó en una obra de teatro en la que cantaba a distintos autores catalanes y también había una canción suya. En la presentación de un libro canté una versión de Pare frente a él. Ya no me acuerdo del orden en que sucedieron las cosas, pero sí de que le gustó lo que hacía y me invitó a cantar con él. Cantamos dos veces juntos Palabras de amor. Luego hice una antología de canciones de diversos artistas y me pidió que cantara con él Plany al mar. Sé que aquí, en Argentina, Serrat es Dios y eso me encanta. Otra cosa maravillosa que me sucede con Serrat es que compuso Mediterráneo en mi pueblo, Calella de Palafrugell. En las tabernas de ese pueblito tan pequeño cantaba y tocaba mi padre. Yo también comencé a hacerlo allí a los 4 años, pero a los 12 allí descubrí mi vocación y entré en un trance. Me di cuenta de que eso era importante para mí más allá de los estudios. También en esas tabernitas Serat vivió un tiempo. Hace dos veranos decidimos cantar allí Mediterráneo y Plany al mar que son las dos caras de ese mar. Pero ese día hubo una tormenta terrible y solo las cantamos en el hotel él y yo. Yo lo admiro mucho y él siempre me ha cuidado también mucho, por lo que le estoy muy agradecida. Ceo que es muy difícil hacerse mayor como artista en los tiempos en que vivimos. Mientras en otras culturas se respeta la sabiduría del mayor, en España todo pasa muy rápido, todo caduca, pero él permanece.

-¿Además de cantar canciones de otros autores también componés?

-Sí, también compongo. Cada una de las dos cosas me despierta sensaciones distintas. Componer es algo muy íntimo que se hace en soledad. Luego el arreglador lo viste, lo mejora, pero componer significa estar a solas con uno mismo. La interpretación es otro estado más animal. Cuando canto algo mío, es como si fuera de otro, es como si me versionara a mí misma. La composición, en cambio, te permite sacar todo lo imaginario. Te puedes imaginar la melodía de una trompeta y puedes escribir unas palabras. La composición me vacía porque vas sacando cosas que se transforman en historias.

-¿Cantás solo en catalán o también en castellano?

-En el primer disco que publiqué escrito por mí cantaba en catalán, castellano y portugués, pero también canto en inglés y en francés, Lo que me resulta más natural es hacerlo en castellano, catalán y también en portugués porque mi hermana vive en Portugal y yo compongo mucho allí, en el campo. 

-Quizá por eso lo que yo escuché tuyo tiene un aire de fado.

-Sí, me lo han dicho, pero con el tiempo he descubierto que no es fado, lo que sucede es que es ibérico. Lo que conocemos es el fado y el flamenco que hacen esos melismas, esos dibujos con la voz, esos tirabuzones vocales. Pero eso no es solo característico del fado y del flamenco. Todas las abuelas de la península ibérica tienen esa forma de cantar.

-Incluso en la chaya del norte argentino se da un manejo de la voz parecida a la del flamenco.

-Sí, es cierto.

–¿Qué vas a hacer en La Noche de la Feria?

-Creo que esta es la tercera o cuarta vez que vengo a la Argentina, pero entiendo que este concierto es muy especial. Es una invitación que se me hace, está el tema de la literatura, el tema de Barcelona, hay un contexto que es preciso tener en cuenta. Sin embargo, siento que lo que tengo que hacer es algo muy natural para mí porque tiene que ver con la poesía y con la música, estoy en Argentina donde tengo muchos amigos, me ha influido su folklore y alguna vez he cantado una zamba y una chacarera. Habrá canciones escritas por mí y otras por poetas catalanes, alguna canción que he compuesto para una película de Uruguay que tiene también cierta influencia argentina. He invitado a amigos músicos, hemos hecho una creación nueva mezclando música de aquí y de allá. Somos amigos y nos admiramos mutuamente la música que hacemos. No va a ser un producto preproducido. Vamos a hacer lo que más nos gusta, vamos a hacer música.

A partir de las 20 del sábado la entrada a la Feria será gratuita lo mismo que el recital que tendrá lugar en la pista central.  Silvia Pérez Cruz se presentará en la con Marco Mezquida en piano, Aleix Tobias en percusión, Carlos Montfort en violín, Bori Albero en contrabajo y Mario Mas en la guitarra; además de la participación especial de los amigos argentinos de Aca Seca.