El 8 de noviembre de 2018 más de 10 mil personas llenaron el estadio de Arsenal para ver un partido de fútbol femenino. Argentina recibía a Panamá por el repechaje para el Mundial Francia 2019. Fue una convocatoria récord, la muestra de que la popularidad del fútbol femenino estaba en crecimiento. Luego llegó la confirmación, con el furor durante la histórica actuación de la Selección en el Mundial, el reconocimiento a las futbolistas y la semi profesionalización del campeonato de Primera, con la transmisión de partidos en directo. A ese camino ascendente que recorre el fútbol femenino en el país ahora se podría agregarle un escalón más: la Asociación del Fútbol Argentino presentó ante la FIFA su candidatura para ser sede del Mundial Sub 20 que se jugará en enero de 2021.

El torneo tiene fecha para jugarse entre el 20 de enero y el 6 de febrero próximo. La sede conjunta ya había sido asignada a Costa Rica y Panamá, pero problemas sanitarios y económicos por el contexto pandémico ponen en riesgo a los países centroamericanos como anfitriones. Por eso la AFA le envió una carta a Gianni Infantino, presidente de la FIFA, en la que se ofrece como sede del Mundial, lo que “permitirá afianzar y difundir la práctica del fútbol femenino en nuestro país”. La carta está firmada por Claudio “Chiqui” Tapia, quien alguna vez aseguró que busca ser el presidente de la igualdad de género y que, más allá de los avances, recibe críticas por la escasa infraestructura y planificación que aún existe en el fútbol femenino.

El seleccionado argentino femenino Sub 20 quedó eliminado del Mundial tras no avanzar de fase en el torneo Sudamericano que se jugó en marzo en el estadio San Juan del Bicentenario. La fase final quedó en pausa por la pandemia y está programada para octubre. Más allá de no haber conseguido boleto por el mérito deportivo, en caso de que Argentina sea sede del Mundial entraría al torneo por ser anfitrión.

Pero eso no sería lo único trascendente. El país fue sede de Copas del Mundo de la FIFA en sólo dos ocasiones: el Mundial 78, del que se cumplieron 42 años el pasado jueves del momento en que Jorge Rafael Videla le entregara el trofeo a Daniel Passarella, y el Mundial Sub 20 de 2001, en el que un equipo genial de José Pekerman, con Javier Saviola como figura y goleador, terminó consagrándose en la cancha de Vélez. Esta podría ser apenas la tercera vez en la historia.

Además, AFA también mandó una misiva a Conmebol para postularse como sede de la Copa América femenina que se jugará en 2022, algo que ya sucedió en 1998, 2003 y 2006. La importancia es que la Copa América en el fútbol femenino es clasificatoria para el Mundial 2023 que se jugará en Australia y Nueva Zelanda y también para Panamericanos y Juegos Olímpicos. En otra carta con idéntico remitente y destinatario, el pedido fue organizar la Copa Libertadores 2021.

Ahora la pelota la tiene la FIFA, que esta semana anunció la sede del próximo Mundial femenino 2023: se realizará en Australia y Nueva Zelanda, y participarán 32 equipos en lugar de los 24 que estuvieron en Francia 2019, donde Estados Unidos se consagró campeón y Argentina participó tras 12 años de ausencia, logrando su primer punto. La candidatura de Oceanía se impuso por 22 votos a 13 a Colombia, que buscaba organizar ese torneo.

ENTRENADORAS

Huracán, uno de los cuatro clubes de Primera División que tenía entrenadoras mujeres en el fútbol femenino y que cuenta con un protocolo contra situaciones de violencia de género, desvinculó a su dupla técnica formada por Juliana Román Lozano y Enriqueta Tato. “En el fútbol las reglas son iguales para hombres y mujeres. Cuando un contrato se acaba, se acaba”, dijo Mabel Salinas, presidenta de Fútbol Femenino de Huracán. “Es un dolor y una falta de respeto quedarse sin laburo en este momento”, dijo la colombiana Román Lozano, además exjugadora del Globo, luego de enterarse de la noticia vía Zoom.