El estadio Tomás Adolfo Ducó fue evacuado esta tarde por la policía por una amenaza de bomba, en la previa del partido de Huracán y River. Según lo confirmado por fuentes policiales, fueron tres los llamados al 911, entre las 17 y las 17:30, menos de dos horas del horario de comienzo del partido, estipulado en un principio para las 19:15.

El gerente de Huracán Fernando Salces dijo a radio Mitre que “el personal policial avisó que hay una amenaza de bomba. Ahora viene la Brigada anti explosivos para revisar el estadio». En ese momento, ya había alrededor de 5000 personas en las tribunas, por lo que se realizó una evacuación completa.

Por ese motivo el micro que transportaba al plantel de River fue parado a dos cuadras del estadio, ubicado en el barrio de Parque Patricios. En tanto los jugadores de Huracán, que se preparaban para realizar la entrada en calor, se retiraron del estadio en un micro y los árbitros en un patrullero policial.

Justamente el árbitro, Germán Delfino, dijo que «la Brigada demora unos 20 minutos en revisar todo el estadio y es posible que el partido se retrase». Para ese momento, los dirigentes recibían llamados del ministerio de Seguridad y de la empresa responsable de la televisación de la Superliga, asegurando que iban a estar dadas las condiciones para jugar el partido sin necesidad de postergarlo para otro día.

Finalmente, el partido comenzó a las 21:15. A la hora de las especulaciones sobre las llamadas falsas, en todos los rincones de la cancha de Huracán se apuntaba por lo bajo a los barrabrava del club y a diferencias que tuvieron en la última semana con la dirigencia, “por cuestiones económicas”.