Seis palabras pueden derivar en una novela. Porque eso es lo que se desató desde que Carlos Tevez le dijo a Germán Delfino, en plena Bombonera: “la concha puta de tu madre” (sic). El juez le mostró la roja, pero aun no se sabe cuántas fechas de suspensión le darán al capitán de Boca. Este martes Tevez debía presentarse a declarar en la Viamonte 1366 ante el Tribunal de Disciplina. Pero el delantero se excusó por una molestia física y presentó un escrito en el que se disculpa con Delfino por los insultos.

Más allá del descargo, lo más probable parece ser que al punta xeneize le den entre dos y tres fechas de suspensión, por las antecedentes inmediatos de casos similares. La expulsión le llegó a Tevez justo después haber convertido su primer gol en el semestre, después de algunas críticas que había recibido por su flojo desempeño en los últimos partidos.

Además de la banca de muchos de sus compañeros, el delantero tuvo un apoyo muy especial: Juan Martín Del Potro, el deportista argentino del momento, lo alentó desde Escocia. “¿A quién no se le escapó la de Carlitos alguna vez? A mí no me pueden expulsar, je. Pero hay que entender que era Delfino en la cancha de Boca después de mucho tiempo sin dirigirnos”, dijo el tenista.