La nueva lista de Precios Cuidados llegará con aumentos en torno al 5% y la suma de nuevos productos. La pelea de fondo es entre el gobierno y los industriales, que reclamaban mayores subas. Al cierre de esta edición seguía la pulseada.

En tanto, en un camino paralelo, el programa de Precios Máximos –que incluye 304 productos– seguirá hasta fines de agosto tal como lo resolvió el gobierno nacional en una decisión calificada como «unilateral» tanto por los fabricantes de productos de consumo masivo como por los supermercadistas. El gobierno prorrogó Precios Máximos por 60 días cuando las anteriores extensiones habían sido sólo por treinta.

El presidente de la Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios (FASA), Víctor Palpacelli, le dijo a Tiempo: «Vemos bien la prórroga de Precios Máximos siempre y cuando se hayan logrado acuerdos con la industria, que estaba solicitando modificaciones y cambios argumentando aumentos en la producción. Lo vemos bien porque el programa ayuda a contener precios y brinda herramientas al consumidor final». Palpacelli advirtió que el temor de los supermercados pasa por la presión que pueden recibir por parte de los proveedores, en caso de que estos actúen en disconformidad con el gobierno. «Va a ser positivo si se puede mantener en el tiempo y eso dependerá de que los proveedores entreguen la mercadería. Si está el compromiso del proveedor, está bien», afirmó.

En Precios Máximos no hubo negociación, pero sí la hubo en Precios Cuidados. Desde el Ministerio de Desarrollo Productivo destacaron: «La renovación de abril se hizo automática, pero esta vez se está negociando, probablemente se sumen más productos. Hoy hay trescientos».

Una fuente de una importante cámara de supermercados apuntó sobre esa negociación: «El 60% de las personas tiene ingresos iguales o menores a los que tenía antes de la cuarentena. Entonces, desde el punto de vista del gobierno, no se puede aumentar. Los supermercados estamos ahí, tuvimos muchos aumentos de costos pero también de ventas. Las que pusieron el grito en el cielo son las industrias».

«Ellos (los industriales) entienden que están al límite y que necesitan una recomposición. Dicen que les crecieron mucho los costos por cuestiones relativas al Covid y a los movimientos del dólar. Ahora, hay proveedores muy grandes que ejercen presión por el lado formal, y también hay medianos y chicos que no entregan mercadería, ya que pueden aumentar los precios en el canal informal, que no tiene tanto monitoreo del gobierno», advirtió la misma fuente y agregó: «Las industrias quieren un 10% de aumento, pero no creo que el gobierno se los otorgue».

Al cierre de esta edición, desde Producción aseguraron que no se había cerrado la negociación y que «se conocerá la nueva lista los primeros días de la semana que viene».

Aun así, según contaron a Tiempo fuentes de la industria, los aumentos se ubicarían en torno al 5%. «Nos dieron un aumento de 7,4% en el café y 1% en el té», contaron desde Cabrales.

Según el IPC GBA de la consultora Ecolatina, la inflación de junio fue del 1,7%. En ese marco, la variación del rubro Alimentos y Bebidas no alcohólicas fue del 0,9%. Según el Indec, en mayo la inflación de Alimentos fue del 0,3% en GBA, mientras que en abril fue del 3,2%. Así las cosas, en el último trimestre la variación del ítem Alimentos en el Gran Buenos Aires fue de apenas el 4,4%. En esos guarismos, se ve el impacto de los programas Precios Máximos y Precios Cuidados.

Controles

En cuanto a los controles del gobierno sobre el cumplimiento de estos programas, la fuente de los supermercados afirmó: «Hacen de cinco a diez inspecciones todos los días. Precios, góndolas y línea de caja. También hacen un seguimiento muy minucioso de las estructuras de costos de toda la cadena. Tienen muy claro qué pueden liberar o no; qué hay o qué falta; qué está atado al dólar o no. Lo tienen muy claro y no improvisan en la negociación».