El fallo de la Corte Suprema de Justicia que revocó en los hechos la personería jurídica de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (AGTSyP) apunta a fortalecer a los sindicatos existentes y es contrario a los simplemente inscriptos que buscan acceder a la personería gremial, dijeron a Tiempo referentes de sectores sindicales y legales.

En rigor, la sentencia deja firme un fallo de la Cámara de Apelaciones del Trabajo, porque la Corte se abstiene de intervenir, que aceptó los argumentos de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en los que impugnó el otorgamiento de la personería gremial a los metrodelegados.

En 2015, mediante el mecanismo contemplado en la legislación vigente, las autoridades del Ministerio de Trabajo cotejaron la cantidad de afiliados de ambas organizaciones. Ante las reiteradas ausencias de la UTA, según lo que dictamina la ley, la AGTSyP obtuvo la representación.

Sin embargo, ahora, todo volverá a foja cero y será la cartera laboral que comanda Jorge Triaca la encargada de dar cauce nuevamente al proceso de compulsa.

Roberto Pianelli, secretario general de la AGTSyP, explicó a Tiempo que «no nos sorprende el fallo. Es una corte con una nueva mayoría constituida por este gobierno. Es la Corte del 2×1».

El dirigente dijo que, desde el sindicato, creen que «es una represalia por haber salido a denunciar la compra de 36 formaciones CAF 5000 que eran chatarra en Madrid y que tienen asbesto, que es cancerígeno. Las sacamos de circulación y paramos hace cuatro días. También es para favorecer a los sindicalistas como la UTA, que hacen lo que se le canta al gobierno».

Fuentes del mismo sindicato, además, hicieron notar que precisamente en estas horas se encuentran en la ciudad recorriendo las instalaciones del subterráneo representantes de las empresas de los metros de París, Lyon, Londres y Berlín, que evalúan presentarse a la licitación para el subte a realizarse en junio o julio próximos. Estos operadores habían presentado sus reparos por los supuestos niveles de conflictividad de la AGTSyP además de su voluntad de reformar los convenios para imponer la multifunción. Por eso, el fallo podría ser también un gesto hacia ese proceso reprivatizador del Subte.

Para Matías Cremonte, presidente de la Asociación de Abogados Laboralistas, «la Corte devuelve el expediente de AGTSyP a Trabajo como sindicato simplemente inscripto y le quita la personería gremial. Está claro que dormirá el sueño de los justos. Hay un intento de debilitar una representación genuina de los trabajadores del Subte. Es un guiño de la Corte al gobierno y puede ser interpretado como un gesto a la cúpula de la CGT a favor del unicato».

Con todo, no se trata de un rayo en cielo sereno. La resolución implica un gesto a los dirigentes de la UTA pero también a los sindicatos de la CGT que se avienen a reconstruir una central condescendiente con el gobierno. Son los que vienen firmando paritarias por el 15% sin cláusula gatillo y que ven con buenos ojos toda resolución que refuerce el control de la CGT por parte de los sindicatos tradicionales.

El proyecto original de reforma laboral presentado por el Ejecutivo incluía un artículo que conminaba a las organizaciones sindicales a normalizar su situación en un plazo de 60 días y que fue interpretado como una amenaza para las que poseen simple inscripción. Ese artículo fue extraído del texto de la ley en las negociaciones con los referentes de la CGT, pero el texto se plasmó en la resolución 17/E 2017 publicada en Boletín Oficial del 7 de diciembre último.

Para Fernando Tato Dondero, secretario General del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA), «el fallo es una alarma más en un contexto de pérdida de libertad sindical y persecución. El gobierno negocia con los sindicatos que le firman el 15% en las paritarias. Es una señal de que, a los que buscamos nuestro reconocimiento sobre la base de una representación real, se nos va a hacer más difícil», concluyó. «