El presidente de Volkswagen, Pablo Di Si, festeja que las ventas de autos van a subir este año entre un 10 y un 15 por ciento. En charla con Tiempo durante el Congreso Económico Argentino (CEA), agregó que la empresa fabricará entre 2000 y 3000 autos más que en 2016. Los números son buenos pero el resultado no lo convence: «Es un 15 o un 20% menos que hace dos años. Hoy a Brasil le exportamos el 50% de lo que les mandábamos tres años atrás. En Córdoba estamos utilizando el 25% de la capacidad instalada».

-¿El argumento es para justificar las 600 suspensiones que anunciaron esta semana?

-No son suspensiones nuevas, son las mismas que teníamos el año pasado. Lo que cambió es que antes eran suspensiones rotativas y ahora son fijas. Es la misma cantidad de gente, solo cambió la metodología de trabajo.

-Las importaciones crecieron mucho en el arranque del año. ¿El mercado local se encamina a ser netamente importador?

-Yo creo que sí, porque las importaciones están liberadas. Hay un flex (un acuerdo de intercambio) con Brasil, pero el desafío que tenemos como país es mejorar la carga tributaria y la competitividad de la industria para exportar. No podemos permitir la importación y después exportar impuestos, pero para eso todos tenemos que contribuir, gobierno, terminales y sindicatos.

-¿Puede precisar qué significa «contribuir» en este contexto?

-Contribuir consiste en no exportar Ingresos Brutos, no exportar impuestos municipales, no exportar IVA, etc. Son todas cosas que afectan a la competitividad necesaria para exportar. En concreto, es necesaria una revisión de Ingresos Brutos para exportación. Hay que bajarlo. También hay que revisar la fórmula del impuesto municipal y el costo de patentamiento.

-¿Y cuál sería la contribución en relación con el empleo?

-Tenemos que tener algún tipo de flexibilización laboral. No sobre la base, pero si tenemos volumen incremental tenemos que tener cierta flexibilización. Si nosotros tenemos una cantidad de mano de obra y hoy Turquía nos pide 3000 unidades extra debería haber una flexibilización que nos permita contratar el resto de personas necesarias para producir ese plus por el tiempo necesario. Esa flexibilización nos va a ayudar a ganar volumen.

-México, Brasil y las multinacionales quieren el libre comercio con Argentina y el contexto político les juega a favor. ¿En cuánto tiempo piensa que se podría llegar?

-El horizonte es que el libre comercio sea una realidad en cinco años, al vencer el flex. Mientras, tenemos que hacer la gimnasia dentro de casa con el sindicato y con el gobierno.

-Tradicionalmente las automotrices presionaron por un tipo de cambio más alto, pero usted no menciona esa variable. ¿Qué cambió?

-La competitividad pasa más por la inflación que por el tipo de cambio. El objetivo es continuar reduciendo la inflación y el cambio va a fluctuar.

-El gobierno reafirmó su política económica en medio de protestas. ¿Qué evaluación hace de los primeros 15 meses de Cambiemos?

-Pienso que empezó con medidas macro muy importantes, pero se equivocó con la eliminación tan drástica de los subsidios, la inflación y este equilibrio entre el empleo, la producción y la importación.

-¿Por qué no llegan las inversiones tan esperadas?

-Yo creo que están llegando. El JP Morgan puso U$S 2000 millones el mes pasado. Está entrando un flujo de dinero importante y ese es uno de los motivos de retraso del cambio.

-¿Y las inversiones productivas?

-Bueno, la industria del petróleo creo que se empezó a mover y la automotriz empezó el año pasado aunque no a la velocidad que todos esperan. Entiendo que en la calle no se ve.

-En la calle hay descontento y conflictividad. ¿Qué percepción tienen las empresas?

-No tengo comentarios. Solamente que precisamos diálogo con los sindicatos. Nuestro diálogo con Smata (el sindicato de mecánicos) es positivo, abierto y transparente. Creo que esto se va a resolver en el mediano plazo, las partes se tienen que sentar algún día y lo van tener que resolver.

-¿Y si hay paro general?

-Bueno, el martes no hubo paro, apenas una movilización y nos perjudicó a todas las empresas. Nosotros produjimos la mitad de lo habitual por cada turno. Hicimos 300 camionetas menos que no voy a vender ni a exportar. Está afectando mucho. Lo mejor va a ser solucionar el problema. «

En Toyota esperan más importaciones

El presidente de Toyota Argentina, Daniel Herrero, aseguró que «las importaciones van a crecer» este año, tras un 2016 en el que la producción extranjera avanzó sobre el mercado argentino con impacto en la producción y el empleo locales.

En el Congreso Económico Argentino (CEA), Herrero aseguró a Tiempo que las importaciones «vienen con fuerza para este año. Este es un mercado que tenía una oferta restrictiva y hoy por hoy la oferta está libre así que van a crecer». El titular de la empresa japonesa señaló además que en 2017 el mercado argentino va a superar «tranquilamente la barrera de las 800 mil unidades» y agregó que la producción «terminará en el orden de las 500 mil», techo que no se pudo superar el año pasado.

A contramano de muchas de las terminales, la producción de Toyota en Zárate se mantiene activa gracias a la demanda de varios países de América Latina. La empresa prevé despachar 20 mil camionetas Hilux más que el año pasado mientras desarrolla un proceso de contratación de personal. «Estamos haciendo un 25% más que en 2016», comparó el empresario.

«El tipo de cambio es una variable más. No creo que vaya a ser la salvación para nuestra competitividad. Estamos trabajando para que los vehículos sean competitivos más allá del precio del dólar», concluyó.