De los 400 mil millones de pesos del déficit fiscal que quiere recortar el gobierno para lograr el visto bueno del Fondo Monetario Internacional, $ 100 mil millones deberían provenir o ser absorbidos por las provincias y la Ciudad de Buenos Aires. De estos últimos, casi la mitad corresponde a los subsidios al transporte urbano de pasajeros, que suman $ 47.560 millones para el año transcurrido entre junio de 2017 y el mismo mes de 2018, según los últimos datos abiertos del Ministerio de Transporte.

Los subsidios al transporte se transfieren a través de tres instrumentos: el Régimen de Compensaciones Complementarias (RCC), el Sistema Integrado del Transporte Automotor (Sistau) y las Compensaciones Complementarias Provinciales (CCP). Los tres ítems sumaron $ 47.559.446.320 en un año.

De ese monto total, casi $ 35 mil millones (el 75%) fueron para subsidiar el boleto en la Ciudad ($ 18.448 millones) y en Provincia de Buenos Aires ($ 16.294 millones). Según pudo saber Tiempo, si bien en un principio la noticia cayó mal en ambos distritos, Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal buscan la forma de resolver en conjunto cómo lidiar con semejante mochila. Que lo paguen los usuarios es la manera más tentadora que encuentran dos de las principales cabezas de un gobierno que aumentó en el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA) más del 300% el boleto de colectivo en menos de tres años.

En términos nominales, a los dos gigantes bonaerenses los siguen en la lista Córdoba, Santa Fe, Mendoza y Tucumán, que suman otros $ 7000 millones. Sin embargo, una de las pocas provincias que salió a calmar las aguas fue Mendoza (recibió $ 1500 millones en el citado período), comandada por el oficialista Alfredo Cornejo. Su ministro de Economía, Martín Kerchner, dijo que «no va a haber aumento del boleto por el traspaso de los subsidios».

Además de los subsidios al transporte, Cambiemos pretendía completar el traslado de $ 100 mil millones con la quita del Fondo Sojero y con el traspaso del costo de la tarifa social eléctrica. Esta última medida fue anunciada el lunes último por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne. Sin embargo, cuatro días más tarde dio marcha atrás a través de un breve comunicado que no ofreció demasiadas explicaciones. Entre el auge y la caída del traspaso fallido, se dio una reunión entre los ministros de Economía de las provincias con el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, para acercar posiciones de cara al Presupuesto 2019. Cambiemos celebró el tono de la reunión, pero un día después bajó el traspaso de la tarifa social eléctrica.

Por esta razón aún está en duda el futuro de los subsidios al transporte; sobre todo, si se tiene en cuenta que la reacción de la mayor parte de los distritos fue negativa. Por ejemplo, en Chaco, Santa Fe, Santiago del Estero y Salta advirtieron que el boleto de colectivo se iría a $ 35, según un relevamiento que publicó el diario El Cronista.

Uno de los que más endureció la posición fue Chaco (recibió $ 376 millones), a través del vicegobernador Daniel Capitanich, quien aseguró: «No se aceptaría el esquema de traspaso ya que ninguna de las provincias está en condiciones de hacerlo».

Por su parte, el gobernador de Santa Fe ($ 2000 millones), Miguel Lifschitz, declaró a Radio Con Vos: «Es injusto que las provincias paguemos el ajuste cuando el déficit es casi en 70% del Estado nacional». En el mismo sentido, se expresó el gobernador de La Pampa ($ 58 millones), Carlos Verna: «Si Macri saca el subsidio, esto implica que habrá un aumento del boleto. No me puedo hacer cargo de un gasto corriente que perdurará en el tiempo». «

Edenor y Edesur

El posible traspaso de Edenor y Edesur desde la jurisdicción nacional a la de la Ciudad de Buenos Aires y la provincia homónima sigue siendo materia de debate de cara al Presupuesto 2019.

Si bien el presidente Mauricio Macri la anunció como un hecho un mes y medio atrás, desde ese entonces han surgido voces que plantearon diferencias con la posición del mandatario.

Una de las cuestiones es que con el traspaso no hay cambios en los subsidios. Edenor y Edesur no reciben subsidios de parte del Tesoro para que los trasladen a los usuarios. Si mantienen fuertes deudas con Cammessa por la energía que compran para luego  distribuir. Los subsidios eléctricos que reciben los usuarios son por el costo de la generación.

El otro componente de subsidio es la tarifa social, que por ahora queda en manos del gobierno nacional.

Por otro lado, un cambio en la jurisdicción debe contar sí o sí con la aprobación de ambas empresas, y hasta ahora no han tenido participación en la discusión, según dijeron a Tiempo desde una de ellas.