Hace ya alrededor de dos meses que el sector se encuentra en conflicto. Desde mediados de mayo, cuando expiró la conciliación obligatoria dictada por la cartera laboral, el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (SUTNA) conducido por Alejandro Crespo, organizó siete paros de 24 horas que lograron paralizar en forma completa las tres plantas que forman parte del sector, Fate, Pirelli y Bridgestone.

Las medidas ya impactan en el sector automotriz que, en algunos casos, se vio obligado a suspender la producción de modelos puntuales por escasez de insumos.

El conflicto corresponde al debate por la revisión de la paritaria 2021-2022 en la que el sector sindical exige una cláusula de garantía de suba del salario real tal como habían logrado en el período anterior en el que consiguieron un incremento del poder adquisitivo del 5%.

Además, reclaman el pago de las horas de trabajo del fin de semana al 200% en contradicción con la jornada americana que rige en el sector y que implica el pago normal de las horas que van desde el sábado al mediodía al domingo.

La intransigencia de la patronal a la hora de conceder los reclamos no parece tener una raíz en la rentabilidad de las empresas ni en el impacto sobre el costo laboral que, según los trabajadores, hoy representa apenas mil pesos por cubierta que tiene un precio de venta al público del orden de los $30 mil. Los salarios iniciales oscilan entre los $70 y $83.

De lo que se trata es de una pulseada para reconfigurar la relación de fuerzas al interior de un sector en el que, como en ningún otro gremio industrial, el sindicato cuenta con una conducción referenciada en la izquierda clasista. El reclamo del pago de las horas al 200%, además, implicaría una apertura del convenio para modificarlo en favor de la parte sindical a contramano de las intenciones más generales de adaptarlos a criterios de productividad como ocurrió, por ejemplo, en la automotriz Toyota. Por eso las cámaras ofrecieron un bono por productividad bajo la forma de un premio sujeto a presentismo que fue rechazado por la parte sindical.

El conflicto ya tiene como próximo capítulo un nuevo paro de 24 horas pautado para el próximo lunes 4 de julio en momentos en los que, además, ya debiera comenzar a conformarse la mesa de negociación para el período paritario 2022-23.

Sin embargo, en horas el miércoles se supo que, tal como lo había reclamado la parte sindical en la última audiencia ante la cartera laboral, el jueves se producirá una audiencia con la presencia del ministro de Producción Daniel Scioli.

Según un comunicado difundido por el SUTNA, el ministro se comunicó en forma directa con el titular del Sindicato Alejandro Crespo para concertar el encuentro en el que buscarán encontrar una salida al conflicto y eludir la nueva medida de fuerza.

Para el sindicato el escenario de la negociación se ha modificado a partir de la resolución del BCRA que incrementó las restricciones para el acceso de dólares para la importación que se conoció esta semana. Es que, aseguran, se trata de un “reclamo que sostenían las patronales del neumático a viva voz en los medios de mayor difusión nacional a través de sus principales directivos (y hasta dueños)”.

A partir de la medida, creen, se incrementará la demanda de productos nacionales mejorando la rentabilidad de las empresas que, además, y gracias al esfuerzo de los trabajadores, podrán acceder a un cupo distintivo de divisas. Es que, señalan, “la reglamentación tiene como parámetro para incrementar el acceso a dólares la cantidad de insumos consumidos durante la pandemia, por lo que el sacrificio de los trabajadores del neumático, en esos difíciles y angustiantes momentos, que trabajaron mañana, tarde y noche, todos los días de la semana, incluidos sábados y domingos, es el factor principal por el cual Fate, Pirelli y Bridgestone pueden obtener más dólares”.