El Banco Central resolvió este viernes subir la tasa de política monetaria a 40% anual antes de que abran los mercados financieros con el objetivo de hacer más atractiva la inversión en pesos y desalentar la compra de divisas en plena crisis cambiaria que llevó el dólar a superar los 23 pesos durante la jornada del jueves.

A esto se sumó la decisión de reducir el tope de activos en moneda extranjera que impone a los bancos para aumentar la cantidad de dólares en el mercado y así reducir la presión alcista.

“La posición global neta positiva de moneda extranjera de las entidades financieras computada en saldos diarios al tipo de cambio de referencia no podrá superar el 10% de la responsabilidad patrimonial computable o los recursos propios líquidos, ambos del mes anterior al que corresponda, lo que sea menor», indicó.

El año pasado, cuando el Banco Central quería apuntalar el dólar, había autorizado a los bancos a mantener en un máximo de 30% su posición en moneda extranjera.

«Adicionalmente a la utilización de la tasa de interés, el BCRA continuará operando con todas sus herramientas de intervención en el mercado de cambios. Estas operaciones podrán ser concertadas tanto al contado como a término», anunció la autoridad monetaria.