El subdirector gerente del FMI, Geoffrey Okamoto, ratificó hoy la intención del organismo de repartir un asignación especial de U$S650 mil millones entre los países que lo integran bajo la forma de Derechos Especiales de Giro. Se trata de un activo de reserva internacional cuyo valor depende de una canasta compuesta por las principales monedas del mundo y que está respaldado por el organismo que sirve para complementar las reservas de los países miembro.

De ese total alrededor de U$S 4.355 millones corresponderán a la Argentina. Son U$S855 millones más que los U$S3.500 millones que corresponderían si, tal como anunciaron, no se hubiera ampliado el monto en forma excepcional.

Sin embargo, la entidad aclaró que esos fondos no podrán ser utilizados para pagar deuda externa sino exclusivamente para financiar gastos de salud y vacunación y respaldar las reservas de los Bancos Centrales.

El nuevo monto recibió el respaldo de los países miembro del G20 la semana pasada. El segundo de Katerina Georgieva en el organismo aclaró que las reestructuraciones de deuda deberán procesarse a través de los mecanismos propios del G20.