Las organizaciones que integran la Unidad Piquetera resolvieron el martes realizar un acampe en el Obelisco ante la decisión de dejar sin efecto el beneficio del Potenciar Trabajo a alrededor de 40 mil jóvenes que, a la vez, percibían las becas Progresar.

Sin embargo, la medida no terminó de sustanciarse porque, luego de ocho horas de permanencia en el lugar, las autoridades del ministerio de Desarrollo Social informaron su decisión de retrotraer la decisión y restituir el beneficio.

Las organizaciones cuestionaron la medida que se fundamentó en una supuesta incompatibilidad para el percibimiento de más de un subsidios argumentando que tanto los requisitos para el beneficio de $23 mil del Potenciar Trabajo como los de las becas Progresar por $7 mil adicionales son cumplidos por los jóvenes que estudian y, además, trabajan en alguna de las cooperativas contempladas en el programa. De avanzar en la medida, aseguran, muchos jóvenes en condiciones de vulnerabilidad se verán obligados a abandonar sus estudios.

La decisión del gobierno de retrotraer la medida y restituir los beneficios de manera retroactiva, sin embargo, no implica el reconocimiento de esa compatibilidad que, para las organizaciones piqueteras resulta del todo adecuada en la medida en que el Plan Potenciar Trabajo pretende dar respuesta a las necesidades alimentarias mientras la beca Progresar busca solventar los costos educativos para colaborar en la culminación del ciclo educativo obligatorio.

El jueves las organizaciones que integran la Unidad Piquetera movilizarán nuevamente por los reclamos más generales que incluyen la universalización de los programas Potenciar Trabajo, la normalización del envío de alimentos a los comedores populares y un plan de viviendas y obra pública para la creación de miles de puestos de trabajo genuino y bajo convenio.