El gobierno nacional obliga a todo el sector público a comprar deuda en Letes para financiarse ante la dificultad de acceder al crédito internacional y la negativa del Fondo Monetario de realizar los últimos desembolsos del préstamo.

Lo hizo a través del DNU 688 que tiene la firma del presidente Mauricio Macri y de todo su gabinete e incluye la deuda “reperfilada”, cuyo principal tenedor es el Fondo de garantías de Sustentabilidad de la ANSES.

Según el decreto, los organismos públicos “sólo podrán invertir sus excedentes transitorios de liquidez mediante la suscripción de Letras precancelables emitidas a un plazo que no exceda los CIENTO OCHENTA (180) días por el Tesoro Nacional”.

Según cuenta el Cronista Comercial, esta medida se efectiviza luego de que algunos directivos del Fondo de la Anses se negaran a firmar la compra de 900 millones de dólares de diferentes Letras ya que no eran la mejor inversión. Con esta medida, el gobierno obliga a todos los organismos a adquirir esas Letras.

Entre los argumentos del decreto, el gobierno señala “la inestabilidad financiera y cambiaria que atraviesa la economía” y que “una de las necesidades más urgentes es la de asegurar el mantenimiento del financiamiento fiscal a corto plazo”.

«Para alcanzar los propósitos antes enunciados, resulta apropiado maximizar la posibilidad de recurrir al financiamiento a corto plazo, a través de los excedentes transitorios de liquidez de todas las jurisdicciones y entidades del Estado Nacional, incluidos los fondos fiduciarios y patrimonios de afectación específica administrados por entidades del sector público», señaló el decreto.