Tras el anuncio de Aerolíneas Argentinas y Austral de la suspensión de 7.500 trabajadores con sus sueldos al 75% los sindicatos aeronáuticos cuestionaron la medida y anticiparon que no aceptarán condicionamientos de tipo salarial. El presidente del grupo aeronáutico nacional, Pablo Ceriani, justificó la medida este lunes al informar que los ingresos de la compañía cayeron 97% en el marco de la pandemia del coronavirus. El plan de la administración es ahorrar $500 millones al mes.  

El anuncio pegó fuerte en el ambiente sindical. La Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) informó que la conducción de la línea aérea convocó a una reunión el miércoles a las 13 pero anticipó que la postura es “no aceptar reducciones salariales”.

A la par, la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) reconoció la dificultad del cuadro que atraviesa la empresa por el derrumbe de la actividad que paró masivamente los vuelos y en particular la actividad turística pero aclaró de antemano que “no aceptaremos ningún tipo de desvinculación laboral encubierta”.

Haciendo una interpretación similar del contexto la comisión directiva de la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA), el otro gremio importante de pilotos que nuclea a los empleados de Austral, adelantó que “no se aceptará ningún despido, merma, o situación que ponga en riesgo las condiciones y la fuente laboral de nuestros representados”.

Por su parte el cuerpo de delegados de la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA) Austral, publicó un “enérgico rechazo” a la noticia de las suspensiones porque “es inaceptable que se descargue la crisis sobre nuestras espaldas”.

Los gremios se manifestaron asombrados por la noticia, si bien la empresa ya había informado previamente la intención de avanzar con la fusión de Aerolíneas Argentinas y Austral, una medida de ajuste del  negocio que preocupó al sector de manera transversal.

En su comunicado Aeronavegantes remarcó que “es ampliamente consciente de la grave situación que atraviesa tanto el país, como la aerolínea” y abogó por soluciones de consenso en el marco de la normativa vigente. Sin embargo el secretario General de la institución, Juan Pablo Brey, declaró que: «Es firme nuestra posición de no aceptar reducciones en nuestros ingresos y preservarlos en su totalidad, y así se lo hemos hecho saber a las autoridades de la aerolínea de bandera».  

A la par el gremialista apuntó contra “la generación constante de rumores e hipótesis” que “resulta contraproducente en esta coyuntura de por sí tan complicada. Como siempre lo hacemos, manejaremos con extrema responsabilidad la delicada situación, y seremos igualmente cautos a la hora de informarles cada novedad”, señaló.

En esa línea el también dirigente de la confederación transportista (CATT) exhortó a la empresa a “ser igualmente responsable en las medidas que proponga respecto de sus trabajadores, que una vez más la han convertido en una herramienta fundamental y estratégica de nuestro país, enfrentando los enormes desafíos que supuso hasta hoy la pandemia de COVID-19 en nuestra sociedad en general, y en nuestra actividad en particular”.