El ministro de Economía, Martín Guzmán, mantuvo este martes un encuentro con la directora Gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, quien calificó la reunión como «muy buena». Guzmán ingresó al despacho de Gerogieva poco después de las 13.30 (hora de Washington, una hora más en Argentina) y estuvo con ella hasta las 15.30.

«Nuestros equipos están trabajando juntos de manera constructiva para ayudar a fortalecer la estabilidad económica, proteger a los vulnerables y promover el crecimiento sostenible. Nuestro estrecho diálogo continuará», indicó la directora Ejecutiva del FMI.

«Muy buena reunión con el ministro Guzmán sobre la situación económica de Argentina y el camino a seguir», indicó la funcionaria en su cuenta de Twitter.

En tanto, el funcionario argentino dijo en la misma red social: «Muy productiva reunión con la directora gerente del FMI, @Kgeorgieva, en la que se profundizaron los apoyos a los principios económicos sobre los que se asientan los planes de nuestro Gobierno». Y agregó que «Estamos trabajando para terminar de dar vuelta la página que ocuparon los endeudamientos insostenibles y las políticas fallidas del período 2015-2019, construyendo condiciones que fortalezcan la recuperación económica y aseguren una estabilidad duradera».

Por la mañana Guzmán y su pequeño equipo, compuesto por el embajador argentino en Washington, Jorge Argüello; el representante argentino y del Cono Sur ante el FMI, Sergio Chodos; la titular de Relaciones Internacionales, Maia Colodenco, y la jefa de Gabinete, Melina Mallamace, se reunieron con el equipo negociador el FMI, que integran Julie Kozack, vicedirectora del FMI para la región, y Luis Cubeddu, encargado del caso argentino, en la Embajada argentina en Washington.

Se postergan los DEG

En la misma jornada, Georgieva anunció que recién en junio presentará a sus colegas del Directorio del Fondo una propuesta sobre una ampliación de capital del FMI de U$S 650.000 millones en Derechos Especiales de Giro (DEG), que es una moneda virtual del FMI basada en una canasta de divisas.

El tema viene tratándose desde enero pasado y ya cuenta con el visto bueno del G20 y del G7. En algunas oficinas se creía que dada la urgencia de la pandemia y la situación fiscal de muchos países, especialmente los más pobres, el FMI aceleraría esa asignación extraordinaria de recursos. Con la declaración de Georgieva, queda claro que esta emisión de DEG quedará sujeta a los vaivenes de las presiones políticas entre los países más fuertes del Directorio. En otras palabras, esos fondos podrían no estar disponibles hasta julio o quizá más allá.

La noticia tiene un costado positivo para la Argentina. A pesar del retraso, significaría que al país le corresponderían unos U$S 4300 millones (Argentina tiene el 0,65% del capital del FMI).

El problema es que esos fondos quizá no estén disponibles para pagar la cuota del Club de Paris que vence en mayo –con 30 días de prórroga para el segundo vencimiento- por poco más de U$S 2400 millones.