El Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) es un oasis en el desierto económico de la crisis sanitaria provocada por la pandemia del Covid-19. Llegar a beber de esa agua tiene algunas complicaciones esperables, en términos organizativos, debido a cuestiones que se resuelven sobre la marcha, en un contexto en el cual la improvisación se ha convertido en una necesidad.

Las limitaciones de muchas personas para manejar nuevas tecnologías ha sido uno de los principales escollos. Por tal caso, unas 3 millones de personas no pudieron aún completar el trámite, al no elegir un medio de cobro. Para ello, tienen tiempo hasta el 1 de mayo.

“Por cuestiones operativas vinculadas al medio elegido, si elegís esta opción el pago estará disponible entre el 4 de junio y el 1 de julio”, aclara la web del Anses sobre las opciones “Extracción en cajero automático Red Link” y “Cobro en Correo Argentino”, sin especificar demasiado sobre esas cuestiones operativas.

Según dijeron a Tiempo fuentes de Anses, esta medida solo rige para quienes realicen el trámite en estos días. Quienes hayan elegido el medio de cobro con anterioridad, «cobran todos a partir del 6 de mayo».

Según contó el titular del Anses, Alejandro Vanoli, a través de la red social Twitter, el IFE alcanza a “casi 8 millones de personas”, de las cuales 5 millones ya eligieron el medio de cobro. De las tres millones restantes, las que elijan cobrar por Correo Argentino o por Red Link cobrarán recién en junio.

El IFE es un beneficio extraordinario por única vez que se empezó a cobrar en abril. En aquel momento hubo críticas al retraso en el pago -reflejadas por Tiempo– ya que se verificó desde mediados de marzo la caída de ingresos en los sectores de población vulnerable a quienes va dirigido este subsidio.

En los últimos días circuló con fuerza el rumor de que el IFE volvería a pagarse, aunque una fuente de Anses le dijo a este medio que «no hay nada confirmado al respecto» y que, de cualquier manera, sigue siendo un pago extraordinario «sin importar el mes de cobro» concreto. Para estas personas, el oasis es por ahora una alucinación.