El Frente de Inquilinos Nacional se reúne este fin de semana para analizar los pasos a seguir en la lucha por la sanción de la Ley Nacional de Alquileres, que fue aprobada por unanimidad en el Senado, pero quedó varada en Diputados.
El sábado 27 y domingo 28 de mayo catorce organizaciones de inquilinos de todo el país se darán cita en la sede ATE Capital. El proyecto, presentado por la senadora del FpV García Larraburu, obtuvo media sanción en noviembre del año pasado y todavía no volvieron a llamar a Comisión en Diputados, dijeron desde Inquilinos a Tiempo.
Diputados del oficialismo presentaron semanas atrás otro proyecto para regular los alquileres. Desde entonces, estamos denunciando que se trata de una maniobra especulativa con el único objetivo de dilatar y tergiversar el verdadero debate que deben dar los diputados, sin pagar el costo político que implica votar en contra de una ley votada por unanimidad en el Senado y con amplio consenso de la sociedad, denuncia un comunicado de Inquilinos.
Los ejes de la Ley son dos: extender el plazo mínimo del contrato de dos a tres años y establecer que los aumentos deben ser anuales y en base a un índice objetivo, que se obtiene a partir de promediar la inflación (IPC) y el salario (CVS). Además, fija que las expensas extraordinarias y los impuestos estén a cargo del propietario.
Por su parte, diputados del PRO encabezados por Daniel Lipovetzki presentaron un proyecto alternativo. El mismo utiliza a la inflación como variable para dividir a los inquilinos en dos grandes grupos: quienes pagan más de 15 mil pesos y quienes pagan menos. Para estos últimos, el precio se actualizaría al segundo año de contrato por el CVS; para los otros la actualización sería libre.
Las inmobiliarias pretenden principalmente que los precios de los alquileres se indexen por inflación y que la duración mínima del contrato sea de dos años.
