En el conflicto que ya lleva 84 días, la justicia le dio la razón a una de las trabajadoras despedidas. Se trata de Yamila Mathon, delegada de sector, cuyos fueros, a instancias del ministerio de Modernización, no habían sido reconocidos por las autoridades del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y que había sido despedida junto con otros 32 delegados electos y otros 226 técnicos y profesionales.

La reinstalación de Mathon es resultado de un fallo de la Cámara de Apelaciones del Trabajo a cargo de los jueces Héctor Guisado y Silvia Pinto Varela que revocaron el fallo en primera instancia que se había pronunciado en sentido contrario denegando la medida cautelar presentada por los trabajadores al amparo de sus fueros gremiales. 

Otros 16 delegados ya obtuvieron un fallo de reinstalación favorable en primera instancia aunque su situación podría revertirse en una instancia superior. El antecedente de Mathon, claro, es una señal firme de que la justicia ha entendido que, al menos para el caso de los delegados, las cesantías son ilegítimas y anti sindicales. Así las cosas, en caso de que las autoridades del Instituto decidieran apelar las cautelares que ya salieron a favor, la Cámara de Apelaciones debería ratificar esos fallos.

En diálogo con Tiempo, Yamila Mathon, explicó que “el dictamen dice que debo ingresar a trabajar dentro de tres días. En lo personal estoy muy contenta porque mi hija vuelve al jardín aunque todavía quedan 29 niños que fueron arrancados del jardín. La mía es la segunda hija que vuelve.”.

Sobre el significado político del fallo, la delegada explicó que “es un excelente antecedente para el conjunto de los trabajadores estatales que la justicia reconozca a los delegados. No solo el INTI sufrió esta maniobra de impugnaciones por parte de Modernización. Es un organismo que no tiene derecho a inmiscuirse en asuntos sindicales y el fallo es un señalamiento en ese sentido.”. 

Por otra parte, Mathon señaló que “es un punto de apoyo que devela otra de las mentiras de las autoridades. Las últimas cautelares que salieron a favor se dan luego de que los trabajadores evaluaran que fracasó las mesa de negociación. Nos pidieron un gesto que dimos, porque se suspendió el paro y el acampe desde el 13 de marzo y, lejos de cumplir con las 45 reincorporaciones inmediatas, el plan de reingreso paulatino y la devolución de los días descontados, militarizaron, descontaron en forma masiva por segunda vez en marzo y, además, lanzaron un proceso de retiros voluntarios e informaron que en dos semanas se implementaría la reestructuración.”. 

Sobre el vínculo entre el fallo y el desarrollo del conflicto que ya lleva 84 días, Yamila Mathon opinó que “los jueces hicieron su análisis en el marco de la justicia pero, sin lugar a dudas, un conflicto de esta dimensión, con un alto grado de visualización, aporta elementos a los jueces más allá de lo formal. No dejan de ser ciudadanos que ven lo que pasa en el Instituto.”. concluyó.