En un comunicado difundido hoy, el Consejo Directivo de la CGT señaló que lo que reconocen un “legítimo reclamo en defensa de los derechos laborales” de la bonaerense derivó en “una amenaza real al normal funcionamiento del Estado”.
Por eso, si bien reconocen la legitimidad del reclamo salarial y su descontento creen que su “visibilidad quedó expuesta en las primeras horas del conflicto” y que, “todas las acciones posteriores constituyen un exceso que atenta contra el normal funcionamiento de las instituciones”.
Por eso exigen que la policía bonaerense se “subordine a los mandos institucionales” porque “la desigualdad social, la pandemia y la difícil situación económica no pueden justificar la insubordinación de la fuerza policial”.
La conducción de la central obrera, a la que no pertenencen las fuerzas policiales que están impedidas de organización gremial, convocó a un «diálogo orgánico y jerárquico» como «camino para devolver la tranquilidad a todos los ciudadanos».
Por otro lado, exprasaron su acompañamiento al gobernador y «compañero Axel Kicillof» cuya gestión «apoyamos en estos críticos momentos».