La titular de la Oficina Anticorrupción (OA), Laura Alonso, llamó a los empresarios de la construcción a «denunciar» y «reportar» al gobierno casos de corrupción en las licitaciones de obra pública y, fundamentalmente, a las personas a las que se sospeche responsables por actos de ese tipo, entre los que enumeró a empleados, sindicalistas, funcionarios del Estado y empresarios. 

«Comprométanse, denuncien» y «no les regalen nada a los funcionarios» soltó, sin pudor, ante la concurrida 65ª Convención de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), que se realiza esta tarde en un renombrado hotel de la zona de Retiro con unos 1.300 empresarios del sector y funcionarios del gobierno nacional. 

Alonso hizo foco en el tema de la corrupción y se concentró especialmente en el sector sindical, en particular al reciente caso del secretario de la Unión Obrera de la Construcción (Uocra) de La Plata, Juan Pablo «Pata» Medina. En el mismo sentido, aprovechó su discurso para interpelar repetidamente al titular de la Uocra nacional, Gerardo Martínez, quien minutos antes había pedido no confundir corrupción con actividad sindical. 

A la hora de referirse a los empresarios, la titular de la OA esgrimió cordialidad y abundó en elogios, pese a que se trata de un sector del empresariado que estuvo históricamente bajo la lupa por el acceso de sus empresas a las licitaciones de obra pública, una problemática que le valió el mote de la Patria Contratista. 

Alonso llamó a los presentes a «trabajar juntos (con el gobierno) contra la corrupción», señaló que en años anteriores «hubo mucho dinero despilfarrado o que iba a bolsillos de alguien que hoy está detenido (en alusión al constructor santacruceño Lázaro Báez) y que contaminó con sus prácticas a un sector como ustedes, que da trabajo y mucho más al país», comparó. 

La funcionaria destacó las licitaciones de obra pública por parte del gobierno. En particular elogió al ministro de Energía, Juan José Aranguren, a quien atribuyó «una revolución de transparencia» en la metodología de licitación que implementa en la cartera a su cargo. «Es una revolución porque rompió kioskos con un sistema sin privilegios, sin coimas y sin vivos que te reúnan  en una oficina a proponer algo indebido», agregó la exponente en un juego de palabras con el que pareció referirse al ex ministro de Planificación del kirchnerismo, Julio De Vido. 

En el mismo sentido, Alonso hizo una pausa para subrayar la importancia de la Ley de Participación Público Privada (PPP) para el sector y para el gobierno «porque señala que tenemos expectativa de mediano y largo plazo» pero volvió a la carga con un reclamo polémico para los empresarios presentes: «denuncien quiénes son los empleados, jueces, sindicalistas o hasta los empresarios que pagan coimas o piden coimas» porque «nuestro mayor desafío es parar la corrupción» pero «necesitamos que vengan y reporten; les garantizamos anonimato», aseguró. 

El pedido fue para empresarios del alcance nacional pero también para los que operan en provincias y municipios «donde los vivos se multiplican», lanzó la referente de la AO antes de aclarar que «es el mandato que me dio el presidente (Mauricio Macri)».   

No faltó el reclamo habitual de inversiones y la promesa de más desembolsos públicos para obras en 2018. Alonso adelantó que en 2018 el gobierno invertirá «en forma descomunal, $400 mil millones en infraestructura solo a nivel nacional» y comprometió a los empresarios con la «obligación de generar al menos 700 mil puestos de trabajo nuevos».