La cara visible del triunfo de la lista clasista Negra-Roja-Granate sobre el oficialismo en el Sutna es Alejandro Crespo, de 40 años. Trabajador de Fate desde 2004, se sumó al Partido Obrero en 2013.
–¿Qué evaluación hace del resultado de las elecciones en el Sutna?
–La escalada de los últimos años y la parálisis de las burocracias sindicales frente al ajuste aplicado por el kirchnerismo y ahora por parte del gobierno de Mauricio Macri, hizo que los trabajadores busquen una alternativa. Se trata de un proceso más general que supera al resultado del Sutna. Así se vio en los Sutebas (las seccionales del sindicato de la educación bonaerense), en el Sitraic (construcción). Eso es lo que llevó a que los trabajadores vean con  buenos ojos a las agrupaciones independientes de estos gobiernos ajustadores y de las patronales. Las corrientes combativas y clasistas expresaban algo distinto a esas burocracias.
–En ese marco, ¿cuál fue la causa por la cual perdió Pedro Wasiejko en el Sutna?
–Wasiejko abandonó las reivindicaciones más sentidas de los trabajadores, como la lucha contra el impuesto a las Ganancias, pero principalmente estaba atado a las patronales. No podía reaccionar ni siquiera ante un despido. Eso fue más fuerte que su afiliación al kirchnerismo. Los trabajadores no podían tragar más una dirección que dejó pasar el ajuste. Ahora frente al macrismo no ha cambiado en nada su posición.
–De cara al futuro, ¿qué opina de la ley antidespidos y la posición de las conducciones sindicales?
–Poner algún tipo de costo a los despidos como la doble indemnización no tiene efecto. Los trabajadores quieren preservar sus puestos de trabajo, no cobrar un peso más en caso de caer despedidos. La garantía que tienen que dar las centrales sindicales es que no hayan más despidos y defender el trabajo. Su función es explicar qué lucha darían frente a esos ataques. No es útil para ese objetivo poner una doble indemnización. Se necesita un plan de lucha para prohibir los despidos.
–¿Espera que más sindicatos sean ganados por la izquierda?
 –La perspectiva surge de la experiencia que vivieron los trabajadores durante todos estos años. No tienen ninguna confianza en estas conducciones que se muestran todo el tiempo del lado de las patronales y de quienes producen estos ajustes. La perspectiva es que se desarrolle lo que todavía aparece como algo incipiente en cada una de las fábricas y lugares de trabajo. El Sutna será un caso más para contar.