“Los metalúrgicos fuimos víctimas de una extorsión por parte del Gobierno Nacional”, aseguró a Radio 10 Oscar Martínez, titular de la UOM en Río Grande, luego de firmar un acuerdo inédito con las empresas electrónicas de Tierra del Fuego en el que no habrá despidos pero tampoco paritarias por dos años.

“No nos dejaron alternativas ante las amenazas de despidos. Es como el chiste del prisionero que está condenado a muerte y acepta el ´dunda dunga´”, graficó en diálogo con Mañanas Sylvestre el dirigente sindical, que participó del encuentro con la gobernadora Rosana Bertone y funcionarios nacionales.

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El dirigente gremial señaló que “la gobernadora venía siendo obsecuente con las políticas del Gobierno Nacional”, pero destacó que “en esta circunstancia hizo una convocatoria para defender los puestos de trabajo”, en una provincia que, según él, “encabeza los niveles de desocupación del país”.

Para el dirigente de la UOM, la reforma impositiva “pone en riesgo los más de 10 mil puestos de trabajo directos en el sector, que suman un número similar o mayor de indirectos y que hace que alrededor del 60% del empleo privado tenga ese origen y esa fuente de financiamiento o de ocupación”.

“Esto que es difícil, que es un trago amargo que nos toca afrontar, es también parte de la responsabilidad que hemos asumido de intentar transitar para defender nuestros derechos, la soberanía y seguir viviendo en la provincia”, concluyó.