Pese la venta de autos cero kilómetro puede terminar el año cerca del millón de unidades despachadas, las concesionarias se quejan por la “baja rentabilidad” y apuntan contra las fábricas de autos, a las que acusan de ejercer presiones para colocar el stock que no pueden vender en Brasil y de capitalizar el grueso del negocio.

Las autoridades de la Asociación de Concesionarios (ACARA) también cargaron contra la administración de la provincia de Buenos Aires, a cargo de María Eugenia Vidal, porque “no garantiza la baja de impuestos ni la seguridad jurídica”, acusaron.

Las empresas del segmento comercial vienen de un par de años de mucha dinámica. La venta de vehículos 0km sobresalió en 2016 y se encamina a cerrar este año en niveles récord. Sin embargo, los vendedores suman quejas.

En conferencia de prensa, los empresarios destacaron el ritmo de la actividad y aseguraron que los precios de los autos este año subieron un 14%, por debajo de la inflación que reconoce el gobierno. Sin embargo atribuyeron el mérito a la llegada masiva de autos importados desde Brasil.

“Por naturaleza dependemos de las terminales pero hay un abuso de la posición dominante”, señaló el vicepresidente de la entidad, Abel Bomrad, cuando lo consultaron sobre la relación con las fábricas de vehículos, que en los últimos años se dedicaron más a la importación que a la industria local.

“Hace años que le venimos sacando las papas del fuego a Brasil”, agregó el empresario en referencia a la cuestión de la rentabilidad.

El secretario General, Rubén Beato, agregó: “Hay una superoferta de autos en el mercado local porque las terminales nos bajan camiones enteros de vehículos en su mayoría brasileños. Nosotros compensamos con precios y promociones pero sin rentabilidad no se va a poder sostener en el tiempo”.

Los referentes de ACARA también elogiaron las reformas que impulsa el Estado. En especial destacaron que hay “avances” para que las provincias bajen Ingresos Brutos. El dirigente Abel Bomrad señaló que ya hay doce gobernadores que se comprometieron a reducir las alícuotas a la par de otros cuatro que están cerca de sumarse.

En particular, los concesionarios apuntaron contra la provincia de Buenos Aires y reconocieron que podrían llevar a la administración de Vidal a la Justicia “por no ajustarse al Código Civil de la Nación, que es superior al código tributario de una provincia”.

“Específicamente con la provincia de Buenos Aires tenemos u problema conceptual por el cual nos vamos a tener que ver en Tribunales”, afirmó Bomrad, porque “no estamos discutiendo la cantidad de contribución de un auto o de un concesionario al impuesto sino la inseguridad jurídica que la provincia le transfiere al concesionario al no acatar el Código Civil”, concluyó.