El Sindicato de Mecánicos (Smata) se reúne este martes con ejecutivos de Ford Argentina luego de que dos referentes de la casa matriz de esa firma dejaron trascender este fin de semana que la automotriz analiza abandonar uno de sus mercados de América del Sur con el argumento de que afronta una fuerte crisis económica.

La empresa está radicada en Brasil y en Argentina, por lo que el trascendido que se publicó originalmente en la agencia Bloomberg encendió la alerta del gremio industrial que encabeza Ricardo Pignanelli.

El secretario de Prensa y Difusión del Smata, Faustino Soler, señaló a Tiempo que tras conocer la versión, el gremio solicitó una entrevista a los directivos de la empresa. La compañía concedió la reunión, que se realizará esta tarde.

Soler se mostró sorprendido por la nota de Bloomberg. «Tuvimos una reunión la semana pasada en la que la empresa planteó todo lo contrario. Esta tarde vamos a ir para que nos aclaren este tema», señaló.

Cristiano Rattazzi, presidente de Fiat Argentina pero también autoridad de la Asociación de Fábricas de vehículos (ADEFA) desconoció la cuestión ante la consulta de este medio y le restó validez cuando aseguró que «la industria automotriz está sólida» en la Argentina.

Tiempo intentó comunicarse con referentes de la firma pero al cierre de esta nota no había conseguido una respuesta. Según la empresa, más de 3.600 personas trabajan en la actualidad en la planta de General Pacheco y en las oficinas administrativas.

Las fuentes

El pasado 22 de noviembre la agencia Bloomberg publicó una nota en la que un asesor automotriz del JP Morgan de nombre Ryan Brikman aseguró que la empresa Ford analiza medidas drásticas para sus mercados en Sudamérica. En este lado del mundo la empresa tiene inversiones solamente en Brasil y en Argentina, si bien vende sus autos en toda la región.

Según las palabras Brikman que publicó la agencia internacional de noticias: «Ford parece estar trabajando en un plan de transformación para estabilizar lo que considera como pérdidas inaceptables en América del Sur, que sospechamos podría anunciarse a corto plazo».

Entre las medidas que sugirió el analista, la empresa intentaría algún tipo de vinculación con sus competidores de la región: «Quizás incluso a través de algún tipo de vínculo formal. También podría implicar salidas selectivas de ciertos mercados», informó.

Según Bloomber, la compañía emblemática perdió U$S 587 millones entre enero y septiembre de este año. Una caída fuerte pero menor a la de 2016, en medio del boom de ventas que se apreció este año en el mercado argentino.

Brinkman, que escuchó la versión directamente del Director Financiero de Ford, Bob Shanks y del presidente de Mercados Globales de la compañía, Jim Farley, explicó que la recuperación del mercado regional se concentró en flota de bajo margen, por lo que no impactó como la casa matriz espera.

La información además coincide con un momento de restructuración de la industria automotriz local. Las empresas, el gobierno y los gremios del sector discuten por estos días un acuerdo llamado Plan 1 Millón, que propone medidas integrales «necesarias» para llevar la producción anual argentina a esa cantidad.

En ese marco, uno de los fines es transformar la producción local para concentrarla en el segmento de las pick up complementando con importación de autos de bajo porte desde Brasil y México; un plan de consecuencias inciertas, por ejemplo, para la mano de obra. 

La iniciativa genera polémica hacia adentro del sector porque implicaría movimientos drásticos, la misma palabra que utilizaron los ejecutivos estadounidenses de Ford que, según Brikman: «Está decidida a hacer lo que sea necesario para detener las pérdidas inaceptables en la región».