El índice de Precios al Consumidor subió 2,1% en mayo, informó el Indec. La cifra fue varias décimas más baja de lo que preveían muchas consultoras y centros de estudio. Pero los precios mayoristas, que se difundieron en simultáneo, reflejaron fuertemente el impacto de la devaluación y crecieron 7,5%, lo que podría estar presagiando que esa suba se trasladará en los próximos meses al sector minorista.

Uno de los factores que ayudaron a bajar el IPC fue estadístico: en el cálculo de las tarifas de agua, gas y electricidad ya se incorporó la quita de impuestos que anunciaron los gobiernos porteño y bonaerense para morigerar el impacto de los nuevos cuadros tarifarios, aunque las boletas con esa rebaja todavía no llegaron a los hogares. Lo mismo ocurrió con el restablecimiento de la bonificación total al consumo de gas para los usuarios con tarifa social, que regirá durante los próximos dos bimestres. Por eso y por el congelamiento en los precios de los combustibles (que se rompió a comienzos de junio y se reflejará el mes que viene), ese rubro bajó 0,7%.

Los demás capítulos del índice registraron fuertes alzas. Comunicación fue el que más subió (3,7%) y Alimentos y Bebidas, el de mayor peso en la canasta familiar, lo hizo 3,3%, empujado por las fuertes remarcaciones en harinas (31,2%), fideos (9,5%) y pan francés (8,7%), a los que se les sumaron otros productos estacionales como lechuga (88,9%) y cebolla (40%). En lo que va del año el conjunto de precios relevados subió 11,9% y en los últimos doce meses 26,3%.

Los números fueron mucho más gruesos en el Indice de Precios Internos al por Mayor (IPIM), que subió 7,5% y acumula 37,7% de variación interanual. Aquí se notó con mayor claridad la influencia de las rebajas dispuestas por el gobierno, ya que el Indice de Precios Básicos al por Mayor (IPIB), que no incluye el efecto impositivo y refleja más nítidamente las decisiones tomadas por los fabricantes y productores,trepó 8,4% en mayo y 40,7% en comparación con la misma fecha del año anterior. ¿La explicación? La cotización del dólar, que el mes pasado saltó 22,2%. En lo que va de junio la divisa creció otro 11,4% que le va a agregar presión al próximo índice de precios y a todo el conjunto de la economía.