Trabajadores del mayorista Medamax se movilizaron esta mañana a las instalaciones de la empresa ubicada en la localidad de Gregorio de Laferrere, en La Matanza, en respuesta al despido injustificado de diez trabajadores. Según informaron desde el Sindicato de Empleados de Comercio de la zona oeste (SEOCA), el conflicto comenzó ayer por la tarde cuando desde Recursos Humanos convocaron a varios de los empleados para decirles que habían sido despedidos.

Los trabajadores rechazaron la medida y de inmediato trataron de comunicarse con los representantes de SEOCA, pero se encontraron con la resistencia de la encargada de Recursos Humanos de la empresa que los dejó encerrados en su oficina.

“Esto es algo inaudito, de repente despidieron de forma arbitraria  a diez trabajadores y encima los querían obligar a firmar su desvinculación sin pagar la indemnización ni nada, por eso estamos defendiendo los puestos de trabajo de los compañeros”, denunció Jorge Vega, secretario gremial del SEOCA.

Gastón Figueroa, uno de los delegados de la empresa, contó que “hay mala intención de parte de la empresa porque desde el año pasado, entendiendo la situación del país, estamos haciendo tareas extra para no quedarnos sin trabajo; trajimos clientes para que se venda más, y estamos trabajando más que las otras sucursales”.

Además, Figueroa añadió que hace algún tiempo la empresa –que se dedica a la venta y distribución mayorista de perfumería, elementos de limpieza y cosmética- les informó que quería despedir treinta trabajadores, pero tras arduas negociaciones, los delegados consiguieron que esa cifra se reduzca a diez y, al mismo tiempo, armaron un listado de quienes querían renunciar: “Hubo coincidencia, diez compañeros se querían ir, entonces acordamos que les paguen lo que corresponde, pero la empresa, sin decir nada y de prepo, despidió a otras personas que no estaban en el listado”.

Otro de los delegados de Medamax, Hernán Carrizo, denunció que “ayer a las dos de la tarde vino la responsable de Recursos Humanos, nos llevaron a una oficina a diez compañeros y a mí, y nos notificaron que los compañeros estaban despedidos, a raíz de eso, cuando intentamos salir de la oficina para hablar con los responsables del gremio, no nos dejó salir, y comenzamos la medida de fuerza. Nosotros no íbamos a pasar por encima de la chica, no le íbamos a faltar el respeto a pesar de que ella sí nos lo estaba faltando”.

Carrizo añadió: “Cuando nos anoticiamos de las intenciones de la empresa, nos pusimos de acuerdo para llevar a cabo una medida de fuerza que cuenta con el apoyo de todos, porque sabemos que si prosperan estos despidos, los próximos podemos ser nosotros”.

A estas horas, los representantes de los trabajadores y del Ministerio de Trabajo están reunidos en las oficinas ubicadas en San Justo. En tanto, los trabajadores continúan en las puertas de la empresa a espera de que se dicte la conciliación obligatoria.