El INDEC dio a conocer hoy la evolución de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y la Canasta Básica Total (CBT) que miden los ingresos que se precisan para superar la línea de indigencia y de pobreza respectivamente.

En ambos casos la suba durante el mes de mayo alcanzó un 4,6%. Poco menos que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que durante el mismo mes escaló un 5,1%.

Sin embargo, para que una familia integrada por dos adultos y dos menores sorteara una situación de pobreza hubiera precisado reunir $99.677 en mayo. Para eludir una situación de indigencia, reuniendo los ingresos necesarios para afrontar los alimentos con las calorías mínimas para evitar la desnutrición, esa familia necesitó en mayo $44.499.

Según el último informe del INDEC, durante el segundo semestre de 2021, 17,1 millones de personas se encontraban en una situación de pobreza de las cuales casi 3,6 millones sufrían un cuadro de indigencia.

Según datos del Ministerio de Desarrollo Social son casi 1,3 millones los beneficiarios de planes Potenciar Trabajo que perciben un monto equivalente al 50% del salario mínimo vital y móvil que en mayo estaba fijado en $38.940. Ese total de planes alcanza para garantizar un ingreso de $19.470 a apenas el 31% de los hogares pobres o a poco más del total de hogares indigentes que rozan el millón.

Así las cosas, según los datos oficiales disponibles, una familia tipo debería percibir cinco planes Potenciar Trabajo para reunir, con ese solo ingreso, lo necesario para eludir la pobreza. La hipótesis es técnica y legalmente inviable pero sirve para dar cuenta del monto del ingreso con relación a lo que una familia necesita realmente. Con dos ingresos Potenciar Trabajo una familia lograría perdibir apenas el 87% del valor de la canasta alimentaria que mide la indigencia y el 39% de la canasta de pobreza.

La línea de pobreza, sin embargo, ya no representa una amenaza solo para los trabajadores desempleados o informales.

Según datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) de la AFIP que difunde el ministerio de Trabajo, en marzo, la mitad de los trabajadores asalariados privados percibían haberes inferiores a los $98.939 brutos. Con los descuentos por jubilación y obra social ese valor cae hasta los $82.120.

Proyecciones privadas indican que ese valor alcanza para mayo los $88 mil dando cuenta que más de la mitad de los trabajadores registrados no perciben salarios suficientes para garantizar que su familia reúna los ingresos necesarios para no encontrarse en una situación de pobreza.

Las organizaciones que integran la Unidad Piquetera reclaman trabajo genuino, universalización de los programas sociales y la elevación del salario mínimo vital y móvil al valor de la Canasta Básica Total.