El gobierno de la provincia de Neuquén suspendió este martes la licencia ambiental que otorgó a YPF para el desarrollo del área Bandurria Sur. Es la consecuencia del intenso derrame de petróleo del pasado 19 de octubre.

La aplicación de la sanción significa que todas las actividades de YPF en esa área quedan paralizadas hasta que la Subsecretaría de Ambiente de Neuquén revea la medida. Según su titular, Juan de Dios Lucchelli, el organismo también ha planteado la aplicación de una multa, que según trascendidos, podría alcanzar a los 28 millones de pesos.

«Se le corrió traslado de la multa y la empresa tiene 10 días hábiles para contestar. A partir de ahí, vamos a determinar el monto de la multa», dijo Lucchelli al diario La Mañana de Neuquén.

Si bien los trabajos de remediación tardarán unos siete meses, en el sector se descuenta que la sanción no durará todo ese tiempo. Con todo, el costo para YPF será enorme, no sólo por la multa sino por el lucro cesante al no poder producir petróleo en esa área, además del costo generado por el contrato del equipo, ahora sin uso.

Bandurria Sur es una de las joyas de YPF en Vaca Muerta, junto con Loma Campana y La Amarga Chica, dos áreas cuya explotación está más desarrollada.

YPF estaba autorizada a perforar ocho pozos en dos locaciones de esa área y realizar las tareas de fracking (fractura del subsuelo) para realizar la producción de petróleo. Según la información del gobierno de Neuquén, la empresa semi estatal sólo había perforado un pozo horizontal, el LCAV-26, del que perdió el control un mes atrás.

Ese día se produjo una explosión en la parte inferior del pozo. La violencia y velocidad de la deflagración impidió el uso de los sistemas de control que tiene la boca de pozo. El resultado fue un intenso derrame durante 36 horas que afectó más de 70 hectáreas pero, especialmente 8 hectáreas en las que se concentró el derrame.