Existen universos en el mundo del cine a los que el paso del tiempo no hace más que agigantarlos. La premisa se vuelve exacta para ciertas películas, y por añadidura hacia los creadores de esas atmósferas.

En el apartado reservado para muy pocos, David Lynch se erige como un director poseedor de un estilo que sobrevivió décadas, modas y hasta a los vaivenes del mercado. Tal vez por eso recordarlo en estos días es hacerlo desde varias situaciones analíticas, pero fundamentalmente por ser un realizador que supo construir grandes historias donde vive el cine de autor.El plus temporal lo conforman su nueva camada de fans, los mismos que rescatan su filmografía como un espacio capital dentro de la historia del cine.

Por este lado del mundo, Buenos Aires no es ajena a las montañas de loas y reconocimientos que Lynch cosecha (a sus activos 71 años) por el trigésimo aniversario de Blue Velvet, su film más celebrado, analizado y recordado de su no tan extensa –aunque notable- lista de largometrajes. Mezcla de film noir y misterio Lyncheano, el universo que despliega BV encontró en las figuras de Kyle MacLachlan, Isabella Rossellini, Dennis Hopper, Laura Dern y Jack Nance a una perfecta gama de actores todavía recordada, siempre en un contexto donde la banda de sonido del film (con tracks de Tuxedomoon y John Foxx, entre varios) incrementaba la difusa atmósfera que saltaba de la pantalla.

En el marco de las celebraciones por los 30 años del film, desde mañána en el MALBA se podrá palpar el documental Blue Velvet Revisited, realizado durante la producción y rodaje de la película en 1986. El material filmado por el director alemán Peter Braats conforma una instancia que no sólo toma valor por exhibir docenas de aristas desconocidas del proceso de producción de Lynch, sino que se trata de un registro (enteramente filmado en Super 8) que se mantuvo inédito hasta nuestros días.


En ese contexto es posible observar, casi en primera persona, a un Lynch tan analítico como reflexivo en el set de filmación: “La película es acerca de las variedades de cosas que suceden en el interior de las personas. Todos tenemos una apariencia, ¿no es cierto? Pero debajo de ella hay cosas sucediendo”, decía a la hora de explicar parte de lo que encerraba Blue Velvet antes de su estreno.

En otra de las múltiples entrevistas que forman parte del revelador documento producido por Braats, se observa a Dennis Hopper tratando de explicar la figura de David Lynch como realizador: «No estoy seguro de que David Lynch sea o haya sido un gran cinéfilo. No creo que eso sea necesario. Creo que es mejor. Lo de Buñuel eran el surrealismo y el dadaísmo, pero David lidia con su propio subconsciente, su forma singular de ver las cosas, que no emula ni remite a la obra de nadie. Es su propia visión. Y es maravillosamente naive”.

A 30 años de todo aquello, los 60 rollos (uno por cada día de filmación) conservados y rescatados del olvido, reconstruyen el universo de Blue Velvet que tanto influenció a varias generaciones de directores. Se trata de un registro que supera el mero “detrás de escena” sobre una de las películas más celebras de la historia del cine.

Blue Velvet Revisited. Será formalmente estrenado hoy sábado a las 22 en MALBA cine, Av. Figueroa Alcorta 3415. En simultaneo, el film será estrenado en Los Angeles (The Downtown Independent). Para acompañar el estreno, en el Malba se proyectara también el film original Blue Velvet y Carretera Perdida de David Lynch en formato fílmico 35mm.