Está muy claro que Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota nunca fue una banda más. Pero a 45 años de su fundación y 20 de su separación, el fenómeno popular y artístico se multiplica hasta niveles insospechados. Las pruebas son elocuentes: los shows monumentales de la banda del Indio ya sin el Indio en el escenario, la presencia siempre convocante de Skay y hasta la creciente presencia de la Kermesse Redonda, el espectáculo liderado por Sergio Dawi y Semilla Bucciarelli. Esa necesidad de seguir agitando el legado de Patricio Rey –y la del público de reencontrarlo de todas las maneras posibles– también se expresa en Una obra redonda, ni más ni menos que una expresión teatral que se propone contar la historia única de la banda que comandaron el Indio, Skay y Poli.

“Este es un show que no es un recital, un musical, una performance o un espectáculo de danza y acrobacia. Es todo eso junto. Teníamos la historia escrita y para contarla decidimos unir varios lenguajes. Buscamos estimular al espectador desde distintos ángulos. Como pasaba en los recitales, como pasa cuando te sentás a escuchar un disco de los Redondos y te pinta todo un mundo. Esa es la particularidad de lo que hacemos: intentamos contar la historia de 25 años  en dos horas de experiencia. Se trata de una fiesta de la liturgia ricotera para entender y disfrutar de la pasión que generan”, explica Verónica Fucci, directora del espectáculo.

Ideada durante la primera cuarentena de 2020, la obra se estrenó en La Trastienda el 4 de septiembre pasado con tres funciones a sala llena. Luego disfrutó de un minitour por el Conurbano que lo llevó por San Justo, Morón y Monte Grande, para luego llegar a La Plata. Este martes será la despedida del año, otra vez en La Trastienda. “La reacción de la gente siempre es de mucha energía, alegría y disfrute. Cada presentación es una fiesta”, comenta Fucci. “Desde el primero momento quisimos ofrecer una experiencia diferente. Por eso armamos una artística con un hilo conductor que nos permite unir la música de una banda en vivo que suena tremenda, la danza, el teatro, el stand up, las acrobacias y hasta algo circense. De alguna manera buscamos inspirarnos en los comienzos de los Redondos, con los happening de artes combinadas donde Enrique Symns leía poesías y había actores entre el público. Pero también sumamos otros lenguajes que se relacionan con lo que nos provoca cada canción. Buscamos un equilibrio entre la calidad artística de las distintas disciplinas involucradas y el sentimiento que se despierta cada vez que suenan las estrofas de sus canciones.”

La obra repasa los múltiples acontecimientos que marcaron la carrera de los Redondos. Desde Gulp a Momo sampler, pasando por el contexto en el que vio la luz Oktubre, la muerte de Walter Bulacio y sus consecuencias, la suspensión del show de Olavarría, los mega shows en River, sus incidentes y mucho más. “Me parece que todo lo que sucede con los Redonditos de Ricota es algo muy nuestro, muy argentino –puntualiza Fucci–. Ahí está una de las claves de su vigencia: ya son parte de todos nosotros. Creo que lo que expresan sus letras y hasta sus gestos nos pasa a todos, en algún lado inevitablemente nos tocan. Ellos fueron reflejando el sentir de las juventudes y eso no ha cambiado tanto, la magia sigue sucediendo. Hay una profundidad que permite mucho análisis y cada vez que uno lo escucha, sea la primera vez o  la número un millón, siempre descubre algo nuevo en esa poética tan particular que tiene las letras y el sonido de los Redondos”.

El espectáculo incluye a 22 artistas en escena, entre músicos, actores, bailarines y acróbatas. “Tiene momentos de mucha emoción, momentos divertidos, momentos duros. Intentamos reflejar la mística en su totalidad, explicando desde lo estético los cambios de época y etapas. Se trata  de mostrar de manera diferente a una banda que marcó nuestra historia. Y claro, siempre se termina bailando y pogueando. Nos gustaría compartir este espectáculo con la mayor cantidad de personas posible. Es una propuesta que hacemos desde el amor y la pasión. La idea es el año que viene llevarla por todo el país. Ojalá podamos hacer realidad este sueño”, concluye la directora.

Una obra redonda

De Fernando Casas. Dirección: Verónica Fucci. Martes 28 de diciembre a las 21 en La Trastienda, Balcarce 460.