Decidido a seguir develando el relato y las complicidades de los grandes medios del país, Javier “El Profe” Romero está de nuevo en el mundo de la radio. Abrí los ojos es su nuevo programa (de lunes a viernes de 7 a 9 AM por Del Plata AM1030) en el horario siempre disputado de la primera mañana radial.

Con los grandes jugadores del espacio de la noticia política, económica y general como competencia directa, Romero tiene la intención de brindar herramientas a los oyentes para vislumbrar los siempre ocultos intersticios y entre líneas de la realidad nacional junto a espacios donde el humor y los deportes siempre están presentes.

“Es absolutamente motivador haber comenzado con una propuesta como esta. Es una buena oportunidad la que me da una radio como Del Plata porque me fui de esa casa en un momento político duro para todas y todos, y donde los que trabajamos en radio experimentamos muchas dificultades”, sostiene “El Profe” con respecto a su anterior paso por la emisora en la que hoy vuelve a trabajar.

–¿Habías hecho primera mañana en el pasado?

-Sí, había estado en programas con participaciones puntuales en radio locales. Pero bueno, ahora la situación es diferente porque estoy al frente en un segmento donde se debe tener mucha energía y buena vibra para comenzar el día, un lugar que miles lo comienzan bien temprano.

–Estás en un horario con pesos pesados en otras emisoras. ¿Cómo es pelear esa franja de la mañana?

-Lo que trato de hacer es lo que hice siempre, y ahí está mi honestidad intelectual. Siempre quiero ponerme en el lugar del oyente en referencia a qué me gustaría escuchar, pero también estar siempre en sintonía con el tratamiento de la velocidad de la noticia. Se trata de no quedarse en una nota mucho tiempo como solía hacer, sobre todo porque el horario de la mañana es así. El que se despierta, viaja en tren, colectivo o en su auto necesita tener un pantallazo de lo que pasa. Por ese lado quiero darle algo de comprensión crítica de por qué los medios están instalando algo también, tratar de mezclar esas cosas pero con dosis justas. No sé si lo logro, pero que lo intento, lo intento.

–En ese sentido el nombre del programa tiene esa intención.

-Es verdad por un lado y por otro tiene que ver con las ganas de la radio de ofrecer un concepto que tiene que ver con la llegada de la mañana, con abrir los ojos a lo que comienza del nuevo día, pero también que al mismo tiempo abra sus ojos para con lo que se encontrará en el exterior, no solo en lo cotidiano sino también con los temas que hablará con sus compañeros de trabajo, sus chats. Frente a una situación en la que la realidad es la que te cuentan por los medios, trataremos de desarmar esa construcción de los grandes medios. Por eso tenemos una sección a la que llamamos La dimensión paralela, porque mi sensación es que ellos construyen una dimensión que no es necesariamente la que vivimos realmente. Inclusive la música va también por ese lado.

–¿Sería como estar en la tarea de desenmascarar un discurso?

Sí, porque fui adquiriendo una gimnasia en esa tarea. El análisis de medios siempre tiene ese factor de ir viendo cómo los medios construyen la noticia. Muchas veces uno cubre una noticia y como periodista al otro día ves en los medios que lo publicado es totalmente diferente. Es como una trampa que te hacen los magos, así que develar eso que no se ve es parte del periodismo.

–Marcelo Longobardi sostuvo recientemente que nuestro país necesitaba ser formateado de un modo más autoritario. Ahí el análisis resulta bien concreto.

-Creo que pertenece a un comentario verdadero de uno de los principales dirigentes políticos de la oposición. Para mí, Longobardi, Lanata, Leuco, Majul están a la altura de Patricia Bullrich o Fernando Iglesias. Lo de Longobardi es la coronación de una idea que ciertos medios vienen proponiendo, algo que trabaja La Nación y que a veces retrocede como sucede con ciertas editoriales que publican. Es una idea que ciertos medios vienen postulando, y más precisamente se hace en Radio Mitre. Los medios se adaptan porque no siempre está bien apoyar golpes, entonces se apartan de eso. De todas maneras hay un sustrato en sus opiniones porque tanto en el caso de Clarín con sus plumas o La Nación con la suyas, primero apoyaron el golpe y después con la llegada de la democracia comenzaron a hablar de eso. En definitiva, el mensaje de Longobardi esconde una matriz autoritaria.

–En esa línea, personalidades laterales como Susana Giménez también son constructores de esa manera de ver al país. ¿Qué análisis te disparan esos dichos?

-Ella es parte también de una construcción histórica del discurso. Los validadores de eso son las personas con las que la sociedad siente más empatía, por eso ese es el rol de las Susanas, los Brandoni, y quienes construyen discursos están muy atentos a eso. Antes estaban Grondona y Neustadt, y hoy tenemos a los Novaresio, los Majul, Hadad, Longobardi, pero el discurso de fondo siempre es el mismo. Para ellos cuando el pueblo hace lo que quiere es toda una barbaridad, se están equivocando. Para los Longobardi los pobres no deberían votar y eso es algo histórico.



Abrí los ojos. Un programa de Javier “El Profe” Romero. Claudia Giardullo (locución), Damián Ramírez (deportes) y Lucho Hachban (humor). Producción: Daniel Romero y Gary Castro. Lunes a viernes de 7 a 9 am por Del Plata 1030 AM.