En tiempos en los que lo novedoso se convirtió en mainstream, La Renga vuelve a apostar por su histórica independencia y por el fuerte vínculo que ha sabido tejer con “Los mismos de siempre”, sus fieles fanáticos. El sábado 15 de agosto a las 23 horas la banda transmitirá el show que brindó en Playa del Carmen el año pasado, en el marco de su gira en México. La emisión no se realizará por las plataformas de videos tradicionales ni por redes sociales virtuales, sino que estará disponible en la página web del grupo, larenga.com. Allí, los que se registren podrán acceder a la emisión del show y, quienes quieran y tengan la posibilidad, colaborar económicamente con los merenderos y comedores de la organización La Poderosa.

Esta propuesta de La Renga coincide con el vigésimo aniversario del lanzamiento de “La Esquina del Infinito”, uno de sus álbumes más emblemáticos, publicado el 11 de agosto de 2000. Se trató de un año extremadamente prolífico para el rock nacional, en el que las publicaciones de discos auguraban una década de mucho mayor vuelo que la que finalmente terminó cristalizándose: además del clásico de La Renga, vieron la luz “Momo Sampler” de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, “Angustia, no, no” de Fun People, “Hijos del Culo” de Bersuit Vergarabat, “Narigón del Siglo” de Divididos, “Verde Paisaje del Infierno” de Los Piojos y la lista sigue.

“La Esquina del Infinito” abre de la misma manera con la que cierra: informales sonidos de ensayo, que podrían considerarse como una descontracturada zapada entre amigos. Al principio, como parte de la canción “La Vida, las Mismas Calles”, y al final, como canción en sí misma, casi homónima a la primera: “Las Mismas Calles”. Entre ambos tracks, se suceden grandes canciones del característico rock pesado de La Renga: “Motoralmaisangre”, “Al que he Sangrado”, “Panic Show”, “El Cielo del Desengaño”, “Arte Infernal”, “En el Baldío”, “En Pie”, “El Rey de la Triste Felicidad”, “Estalla” y “Hey Hey, My My”.

El último tema mencionado es una brillante versión del registrado por Neil Yung & The Crazy Horse en su disco de 1979 “Rust Never Sleeps”, que a su vez tenía dos versiones: una eléctrica que abría el disco“Hey Hey, My My (Into the Black)” y una acústica que lo cerraba “My My, Hey Hey (Out of the Blue)”. La Renga eligió homenajear al músico canadiense no sólo con este cover, sino hasta con el guiño del primer y último tema del CD, una muestra más de la claridad conceptual con la que crearon esta obra de algo más de 43 minutos cuyo arte de tapa marcó una época: una daga atravesando los cuatro puntos cardinales.

Siguiendo en ese camino de múltiples destinos, el grupo del cantante y guitarrista Gustavo “Chizzo” Nápoli, el bajista Gabriel “Tete” Iglesias y el baterista Jorge “Tanque” Iglesias siguen en la ruta del rock, los shows en vivo, la autogestión, la solidaridad y, ahora también, la virtualidad.