A la música popular le faltará para siempre un gran poeta: el domingo murió en Cuba el mendocino Jorge Marziali. El músico de 70 años había ido a participar del Festival del Caribe que se celebró en Santiago de Cuba y fue el domingo junto a su pareja, Marita Alondra y José Luis Serrano hasta Santa Clara para visitar el mausoleo donde está Ernesto Che Guevara. Allí se descompensó y tuvo un infarto que lo dejó sin vida. 

El viernes el periodista y cantautor fue una de las figuras ovacionadas en el festival luego de que presentara “El niño estrella”, una canción dedicada a Guevara. 

Marziali fue un icono de la militancia contestaria de la década del 80 y fue el creador de temas como «Cebollita y huevo», «Los obreros de Morón», «Ese Manuel que yo canto», «Coplas para la libertad», «Elijo criollos» entre otros temas. “Como un gran viento que sopla”, su primer trabajo discográfico llegó junto con la democracia en 1983.

De sensibilidad extrema, Marziali logró plasmar en su obra su afición por la justicia social y humana que lo convirtió en uno de los grandes referentes poéticos de la música popular. Sus canciones lograron construir gran parte de la identidad musical del momento y fue el representante de una generación de compositores que traía sobre sus espaldas a referentes del Nuevo Cancionero. 

Jorge Marziali residía desde hacía algunos años en la localidad cordobesa de Traslasierra junto a su compañera Marita Londra y este año 2017 fue homenajeado por la Secretaría de Cultura de Mendoza en su casa natal. “Aquí nació el trovador, juglar y referente de la Música Popular. Homenaje del Pueblo y Gobierno de Mendoza al cantor y poeta que continúa enriqueciendo nuestra cultura. Vamos a empezar de nuevo, cebollita y huevo, pan y libertad”, dice la placa que fue descubierta en esa casa, el lugar donde dio sus primeros pasos en la tonada. 

Compuso canciones propias y algunas sobre poemas de Daniel Giribaldi, entre otras, y fue además autor de un libro de poemas, «El amor en otro sitio», publicado hace un par de años, y en los últimos tiempos compartió temas junto a su compañera Londra, a la vez que acompañaba los pasos en la música de su hijo Simón. Su discografía consta de las placas Como un gran viento que sopla (1983), «Marziali cerca nuestro» (1986), «Marziali de diario» (1989), «Miradas» (1999), «Padentrano» (2004) y «San Lagente» (2007). En 1993 compuso la banda sonora del filme «El general y la fiebre», en el que también apareció como actor. Además en 2013 publicó su libro de poemas El amor en otro sitio.

La noticia impactó el mediodía del 9 de julio argentino. “Todos estamos conmocionados, no lo podemos creer. Cuánto dolor”, expresó el periodista Victor Pintos, por su parte, el dibujante Luis Scafati contó cómo se conocieron y escribió, “Hasta que un día, como este 9 de julio lluvioso y frío nos golpea la noticia que murió Jorge Marziali mientras se presentaba en Cuba y un silencio inmenso nos envuelve.

Nos queda el consuelo que sigue en sus canciones, en su música y en nuestra memoria .Chau hermano!”. Ignacio Copani también se plegó a los saludos con un fragmento de la bonita “Cebollita y huevo”, “Hasta la victoria, compañero. Hasta el cielo de los más buenos cantando…”, Franco Luciani también lamentó la partida del gran compositor, “Que triste noticia. Buen viaje querido Jorge Marziali!.Gracias!”. Juan Palomino también se despidió del músico y lo recordó con “Cuando Perón era Cangallo”, un tema de Marziali donde Palomino participó con un recitado.

 Sin embargo, el homenaje más conmovedor lo escribió el guitarrista tucumano, Juan Falú. “Tengo que tratar de imitarte, imaginándote duro y silencioso ante la peor de las noticias. Y parar de llorar. Tengo que aprender de tu hija Amaqui, que me acaba de decir serena y firme ‘el viejo se ha ido en su ley’».
En otro tramo de la misiva, sentenció: “Te quiero decir en lenguaje tucumano lo que diríamos después de unos vinitos fraternos: Que se caguen, Jorgito. Que se cague el mundo indiferente, el que no canta buenas canciones, el que vota a gente fea, el que no llora con su gente, el que no sufre su tierra. Aunque sea hoy, por un rato, que se caguen”.

En la carta, Falú también recuerda la primera y última canción que hicieron (“Del buen riego” y “Tonada de antiguo ruego”, respectivamente), Falú expresó: “Se nos ha ido Marziali y a levantar sus canciones. A multiplicarnos en miles de Jorges denunciadores de esta inmundicia que vivimos. Te abrazo hermano y nos abrazamos todos en tu honor, desde el centro de gravedad cuyano hasta todos los rincones de esta patria que tanto amaste”.

Los restos del músico llegarán en las próximas horas a Mendoza donde se realizará un velatorio.