Un tren con 210 personas a bordo llegará este sábado a la localidad de Carhué, en Adolfo Alsina, provincia de Buenos Aires. Hace más de tres décadas que un tren de pasajeros no se detiene allí. Lo hará el Tren Solidario, que circula desde 2001 acercando donaciones a lugares con historia ferroviaria coartada durante el menemismo. Parte a las 21.30 desde la Estación Constitución del Ferrocarril Roca, cargado de donaciones aportadas por organizaciones sociales y 15 kilos de alimentos no perecederos provistos por cada viajero y viajera que se anotó para participar.

“Buscamos concientizar sobre la posibilidad de recuperar servicios ferroviarios que se habían parado en los ’90. Así surgió. Pasaron 20 años y ya hicimos 41 cruzadas a distintos lugares del país”, cuenta Sergio Rojas, al frente de la revista Rieles, impulsora de la iniciativa, de la que forma parte Trenes Argentinos Operaciones –que dispuso el equipo de recursos humanos y técnicos-, así como FerroExpreso Pampeano y Ferrosur Roca, además de los sindicatos ferroviarios La Fraternidad y Unión Ferroviaria.

Este viaje, el número 42, hará una parada en la localidad de Puán, que también aspira a recuperar su tren, y finalizará en Carhué. “Se eligió porque tiene una historia ferroviaria muy rica. Llegaban tres trenes, era un destino turístico. Con ese potencial que tenía y sigue teniendo, hoy hay un tren que corre a Bahía Blanca y podría sumar una extensión y que se recupere el servicio”, anhela Rojas. Y destaca que “hay lugares que recuperaron el servicio de pasajeros a partir de estos viajes solidarios, como General Pico, Vedia, Alberdi, Saladillo, Roque Pérez y otros”.

Las más de 200 personas que viajan se inscribieron previamente para participar y aportar donaciones. Algunas llegan especialmente hasta la estación de Constitución desde provincias como Río Negro, Córdoba y Santa Fe. “Es gente que cree en el sistema ferroviario y le gusta hacer solidaridad. Es un viaje lindo, en familia”, describe el impulsor. Además de los 15 kilos de donaciones por persona, aportan esta vez las organizaciones Abriendo Caminos, Iglesia Ejercito Evangélico, Equinoterapia, Casa del Niño, Taller Protegido Buena Senda y Centro de Día Mimos.

Desde el primer viaje del Tren Solidario, el 8 de abril de 2001, recorrió unos 25.245 kilómetros transportando 692.640 kilos de alimentos a poblados donde hace más de dos décadas que no llegan los trenes de pasajeros. “La idea es que Argentina pueda recuperar las venas de acero en todo su territorio. Sin el ferrocarril, es muy difícil que una ciudad se desarrolle”, dice Rojas, hijo, nieto y bisnieto de ferroviarios.