El jueves en Entre Ríos, el presidente Mauricio Macri dijo que la prohibición de fumigar cerca de escuelas es «absurda» y que no tiene «ningún rigor científico», algo que despertó el alerta de los especialistas en la materia. Por ejemplo, la Red de Abogadas y Abogados por la Soberanía Alimentaria (REDASA) repudió «enérgicamente» sus declaraciones. «En primer lugar, destacamos la profunda ignorancia -y falta de escucha real a los productores- del Sr. Presidente en la materia puesto que lo que la sentencia judicial por él aludida restringe es el uso de los agrotóxicos, no de los fertilizantes», se lee en un comunicado difundido el mismo jueves.

Recuerdan que en efecto, la sentencia limita las fumigaciones en cercanías de las 1023 escuelas porque de lo que se intenta proteger a los chicos es de las moléculas químicas de los venenos que se utilizan en las aplicaciones aéreas o terrestres en las producciones agrícolas cercanas a dichas escuelas. «Estas moléculas, bien silenciosas -y quizás por eso no percibidas por el Sr. Presidente- ingresan a los cuerpos de nuestros pequeños, que son los más vulnerables por estar aún sus metabolismos en desarrollo y porque están en contacto con el suelo, con la tierra, con el agua y con los juegos al aire libre. Y, al ingresar a sus cuerpos, los terminan enfermando y muchas veces matando», agrega el comunicado.

Además, REDASA explica que el mensaje de Macri » constituye una intromisión indebida e ilegal en las atribuciones constitucionales de otros poderes del Estado, violando asi la división de poderes y la forma republicana de gobierno que exige nuestra Constitución Nacional» y desmiente que el fallo carezca de rigor científico, como había asegurado el presidente: «Son innumerables los estudios científicos –tanto nacionales como internacionales -que dan cuenta de los daños a la salud y vida de nuestros gurises, y que sirven de robusto respaldo a la sentencia. invitamos al Sr. Presidente a informarse sobre dichos estudios para emitir en lo sucesivo una opinión fundada. Exigimos al Sr. Presidente que se retracte públicamente de sus dichos y que cumpla con sus obligaciones en materia de derechos humanos establecidas en nuestra Constitución Nacional».