La Obra Social de la Ciudad de Buenos Aires (ObSBA) fue creada en agosto del 2000, luego de la sanción de la Ley N° 472. Nació con el objetivo de ser la continuidad del Instituto Municipal de Obra Social (I.M.O.S.) y posee carácter de Ente Público no Estatal. Pese a contar con una organización mixta con capacidad de derecho público y privado, y con autarquía administrativa y económico-finaciera, el macrismo logró desarticular esa estructura y desde el año 2008 mantiene intervenida a la obra social.

Fue el propio Mauricio Macri quien inicio el proceso de intervención, luego de un fallo favorable de la justicia porteña. Hoy, la obra social está al borde de la quiebra, con una deuda millonaria que superaría los 4.000 millones de pesos. Cifra contraída mayormente en base a contrataciones fantasmas. Todos apuntan a Walter Correa, hombre que había sido elegido como vicepresidente de la entidad por parte de Horacio Rodríguez Larreta, de quien había sido su chofer durante la campaña 2015.

La autarquía de la obra quedó soslayada y la intrusión del ejecutivo porteño fue total. Actualmente tiene a su cargo las órdenes de pago de compra y de contratación; los fondos de la gerencia administrativa; realiza la auditoría de los balances anuales; y todas las decisiones tomadas en los últimos años, que llevan a un proceso de privatización del organismo; situación que se profundizó en ambas gestiones de Horacio Rodríguez Larreta, y que se hizo más notoria desde el comienzo de la pandemia cuando se multiplicaron las consultas médicas.

Un ejemplo concreto de la tercerización que sufre la entidad, se da directamente en la atención del sistema de emergencias que actualmente maneja la privada de asistencia médica Vittal, una empresa contratada por ObSBA que tiene a su cargo el socorro ambulatorio de todos los trabajadores y trabajadoras estatales porteños. Durante la pandemia, la empresa se negaba a entregar una certificación médica para presentar en medicina del trabajo, hecho que provocó varios descuentos salariales ante la imposibilidad de poder justificar los días de reposo.

“Hace bastante que el gobierno porteño, junto al gremio SUTECBA, vienen vaciando la Obra Social, pero estos últimos años esta situación se profundizó”, señala a Tiempo Mariana Scayola, secretaria general del gremio docente Ademys. El conjunto de trabajadores estatales, denuncian que ObSBA incumple con todos los derechos en materia de salud pública: Hay falta de prestadores, profesionales y centros especializados que dejaron de atender a afiliados por falta de pago. “Es una odisea conseguir un turno médico para cualquier tipo de consulta médica o si tenemos que realizarnos un análisis clínico. Hay una demora de entre 3 y 4 meses en cualquier especialidad médica y tampoco tenemos cobertura en la medicación, es por eso que hoy nos movilizamos a la sede de Honorio Pueyrredón 951”, agrega Scayola.

Cada estatal porteño aporta el 6% de sus haberes para recibir los servicios de OBSBA, a diferencia del resto de las obras sociales que reciben el 3% del salario. La diferencia porcentual se explica porque los trabajadores activos sostienen la atención médica de las y los jubilados. Por esta situación realizaron varios reclamos judiciales, además de exigir la participación de todos los gremios en la organización interna de la Obra como lo exige la Ley. En diciembre del año pasado, la Unión de Trabajadores de la Educación, también se hizo eco de las irregularidades que ocurren en la obra social y presentó una intimación en base a miles de reclamos de sus afiliados. La notificación advertía sobre la falta de atención médica en todos los servicios y sobre la negativa de los profesionales a expedir los certificados de atención.

Un vaciamiento que comenzó con Mauricio Macri

En 2008, el ex jefe de gobierno porteño Mauricio Macri, inició un proceso de ajuste y vaciamiento de la Obra Social porteña. A días de haber iniciado su primera gestión, el ingeniero firmó un DNU para intervenir la obra y despedir alrededor de 2500 contratos de trabajos y varias prestaciones médicas que cubría la entidad. Tras varios amparos presentados por los gremios Sutecba y ATE Capital, la jueza Elena Liberatori resolvió en dos ocasiones prohibir la intervención de la Obra social y ordenó reincorporar a los empleados despedidos por Macri. Rápidamente la magistrada fue recusada por la gestión macrista argumentando “supuestos vínculos de la jueza con sindicalistas”. Semanas más tarde otro juzgado revocó ambas decisiones judiciales de Liberatori y habilitó la intervención.

Denuncian a Larreta por un desfalco millonario en ObSBA

En agosto de 2021, Carlos Elías, titular de la Agrupación Celeste de Sindicato Único de Trabajadores y Empleados, denunció las graves irregularidades que venían suscediendo en el organismo. Afirmó que la caja de OBSBA que debería estar en manos de los afiliados no tiene ningún control y que Horacio Rodríguez Larreta y el secretario general de Sutecba, Amadeo Genta, son los responsables del desfalco. Luego de conocidos los datos de la última auditoria realizada en 2021, Larreta dispuso que de los 5 directivos de la obra social tres sean personas que respondan al “tano” Angelici. En su momento, el dirigente sindical explicó que el Directorio de la Obra Social es nombrado por el Jefe de Gobierno de la Ciudad. Para la remoción de los miembros del Directorio el Jefe de Gobierno, no necesita expresar causa alguna.