«Las subas de las cuotas trepan hasta un 40% en algunos establecimientos pagos y el éxodo hacia escuelas públicas rondaría el 20%», afirma el trabajo realizado por el Instituto de Estudios de Consumo Masivo (INDECOM). Según el relevamiento, entre marzo de 2020 y mediados de 2021, el aislamiento total o parcial, como consecuencia de la pandemia, afectó los ingresos económicos de muchas familias que no pudieron cumplir con el pago de las cuotas mensuales. En ese sentido, los colegios privados se vieron obligados a no aumentar las tarifas y a cancelar los intereses por mora lo que afectó su economía, poniendo en riesgo, incluso, su continuidad.

“Entre febrero y julio de 2021, con el retorno de las clases mixtas, y luego, con la vuelta a la presencialidad total, la mora en los pagos de las cuotas mensuales se redujo alrededor de un 40 %», subraya el informe, aunque, luego de la suba de cuotas que realizaron las empresas privadas educativas, la situación volvió a complicarse. La caída del 40 % en la matrícula de escuelas pagas, está compuesta por un 24,6 % de familias que aún no confirmaron si sus hijos seguirán cursando durante 2022 en esas entidades y un 14,1 % que cortaron la comunicación con el colegio y no informaron si van a regularizar su situación. Realidad que se desprende de los propios establecimientos privados que confirmaron a INDECOM, que el 38,7 % de las familias no cumplieron con el pago de la matriculación para el ciclo lectivo 2022.

Es un hecho que la falta de jardines maternales públicos y gratuitos, obliga a las familias a inscribir a sus hijos en colegios privados. Es por eso que, según el informe, en ese sector hubo un incremento en las matriculas del nivel maternal e inicial en el orden del 9 %, recuperando la caída del 7,6 que se produjo en 2021 y creciendo un 1,4 % durante este año. Este sector fue el más afectado durante la etapa del ASPO (Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio), provocando el cierre del 5 % de jardines maternales privados.

Los números concretos que arrojó el relevamiento realizado por INDECOM, afirman que las inscripciones en listas de espera de las escuelas públicas y gratuitas crecieron un 19,4 % con respecto al año pasado.

El estudio se realizó entre el 1 de noviembre y el 23 de diciembre del 2021, y concluyó “que la suba en los valores de las cuotas mensuales volvió a disparar las deudas promedio que mantienen los padres con los colegios hasta hoy, ubicándolas entre los $15.000 y los $90.000″. El análisis se llevó a cabo sobre un total de 211 instituciones de educación privada y unas 77 escuelas públicas, en sus tres niveles de enseñanza (inicial, medio y superior), en el ámbito de 10 jurisdicciones: Ciudad de Buenos Aires, Gran Buenos Aires, Mar del Plata, Rosario, Santa Fe, Córdoba, Mendoza, La Pampa, Neuquén y Río Negro.

La consultora, en un trabajo anterior, había determinado que a fines del 2020 existía «una mora promedio en el pago de las cuotas mensuales del 61,3 %». El trabajo estableció que el 75 % de los padres que no habían podido cumplir con los pagos en término, lo hacían por haber percibido menos ingresos durante la cuarentena, mientras que el 13 % afirmaba que no abonó por haber perdido su empleo, y el 12 % restante reconocía que se negaba a abonar por considerar que la enseñanza virtual no estaba a la altura de los costos que insume la educación bajo la modalidad presencial. Para INDECOM, esa situación trajo severos daños económicos en las distintas instituciones. En este punto, el informe señalaba que «el 71 % de las escuelas ya mantenían deudas de impuestos, servicios públicos, aportes previsionales y proveedores en general».

La Ciudad no tiene capacidad para recibir más estudiantes en las públicas.

Una constante que se repite cada año en la Ciudad de Buenos Aires, la carencia de vacantes en las escuelas públicas provoca un colapso de demandas cada vez que inicia un nuevo ciclo lectivo. La falta de construcción de escuelas públicas en todo el distrito porteño provoca esta situación.

En 2020, Tiempo tuvo acceso a los datos que arroja el sistema de inscripción on line y que el gobierno porteño se niega a oficializar: de un total de 55.520 inscriptos que solicitaron vacantes para sus hijas e hijos en el nivel inicial, sólo fueron asignadas 19.950, es decir, apenas el 35,9% del total. La cifra fue aún peor que la de 2019, cuando hubo vacantes para el 40% de los inscriptos en ese nivel. En primaria, pidieron vacantes 42.235 alumnos, pero de ese número sólo la obtuvieron 23.131. Es decir, un 45,3% se quedó sin lugar en la escuela pública en 2020. En el nivel medio se anotaron 37.794 y sólo se asignaron 19.320 vacantes, es decir que un 49% del total no comenzó el colegio ese año. El sistema de inscripción proyectó ese año que para inicial hubo 12.370 niños sin vacante; en primaria, 3355; y en secundario, 639. Entre todos suman 16.364 sin vacante asignada, que deben sumarse a los 12 mil que asisten a los Centros de Desarrollo Infantil (CeDI) y a los Centros de Primera Infancia (CPI). En definitiva, los chicos sin vacante para 2020 llegan a 28.364.

En 2021 la situación se agravó: Del total de 117 mil estudiantes que pidieron un lugar en los tres niveles de las escuelas públicas porteñas, solamente recibieron vacantes 61.200. ¿Y el resto? Según el sistema de inscripción, en nivel inicial solicitó vacantes 37.945 familias y sólo fueron asignadas 18.384; en primaria demandaron 37.814 y asignaron 23.065; y en secundaria solicitaron 41.317 vacantes y sólo destinaron 19.788. La lógica indicaría que el resto que no obtuvo vacantes, un total de 55.839 chicos, pasarían a integrar la “Lista de Espera”. Pero no, de esa cantidad de estudiantes que quedaron sin vacante, según el ministerio que conduce Soledad Acuña, sólo hubo 11.771 en lista de espera y el resto, más de 44 mil chicos y chicas, fueron repartidos en nuevas categorías creadas en 2021 que se encuentran dentro del sistema de inscripción on line: Espera con Ofrecimiento; Inscripción Incompleta; Documentación Pendiente; Pendiente de Validación; Deshabilitadas; Validación Completa; Validación Parcial; y Validación Rechazada.

Para finales de febrero de este año, se esperan los nuevos guarismos que arroja el sistema de inscripción on line que, como sucede todos los años, promete un crecimiento en la cantidad de pibas y pibes sin vacante en la Ciudad.