La Asamblea Feminista Conurbano Noroeste denunció que atacaron con gas pimienta y huevazos a las mujeres que participaban de la marcha Ni Una Menos en la localidad de San Miguel. 

Por este hecho, el colectivo Ni una Menos responsabilizó al Municipio, por el deficiente operativo de seguridad a cargo del director Hugo Lamera. En línea con el reclamo, desde el colectivo denunciaron además que los miembros de las fuerzas de seguridad no respondieron en ningún momento a las agresiones y que indagaron de forma exhaustiva a las mujeres participantes de la marcha por las actividades a realizar durante la jornada.

Un hecho de similares características había ocurrido el pasado martes 28 de mayo, durante una actividad en la Plaza San Miguel que acompañó la presentación en el Congreso del proyecto de legalización del aborto: dos hombres agredieron a las participantes con gas pimienta sobre los rostros, lo que había llevado a la concejala de Unidad Ciudadana Marcela Viguera a reclamar que se garantizara «que toda la comunidad que se quiera expresar pueda hacerlo con tranquilidad y en el marco pacífico en el que siempre se han dado este tipo de manifestaciones, independientemente de los posicionamientos personales y políticos».

«Nos manifestamos porque somos dueñas de nuestros cuerpos. Es increíble que en 2019 estemos discutiendo esto. Va a seguir siendo clandestino hasta que reflexionen nuestros legisladores», agregó sobre la despenalización y legalización del aborto.

Por otra parte, en la Ciudad de Buenos Aires, también se produjo una agresión contra las mujeres que participaban de la marcha Ni Una Menos: una integrante del Movimiento Territorial de Liberación fue herida por una botella, que habría sido arrojada desde el tercer piso del edificio de la Unión Industrial Argentina, según denunciaron testigos del hecho.

La mujer cayó desmayada por el impacto y fue trasladada al hospital Ramos Mejía para ser asistida. Pocas horas después, la joven fue dada de alta y pudo regresar a su hogar.