El gobernador del Chubut, Mariano Arcioni, denunció este viernes ante el Consejo de la Magistratura al fiscal jefe de la Fiscalía de Rawson, Fernando Rivarola, por mal desempeño en sus funciones y desconocimiento inexcusable del derecho, por la actuación que le cupo en la causa que investiga a un grupo de jóvenes por la violación grupal de una adolescente.

El fiscal utilizó la frase «desahogo sexual» para referirse a la violación, al hacer el pedido de juicio abreviado, medida que consensuó con la víctima, lo que implicaría una morigeración de la pena para tres de los acusados de la violación.

El gobierno chubutense informó a través de un comunicado que la denuncia fue realizada este mediodía en el Consejo de la Magistratura, en Trelew, con el patrocinio del fiscal de Estado, Andrés Giacomone.

Arcioni pidió la instrucción del sumario de acuerdo a lo establecido por la Constitución Provincial, y que se habilite el procedimiento tendiente a la evaluación «del arbitrario accionar» del fiscal Rivarola y posterior separación del cargo.

Por su parte, Rivarola reconoció que “la frase desahogo sexual debe ser erradicada». «Escribo estas líneas luego de una profunda reflexión generada a partir del impacto social y mediático», aseguró el fiscal en un largo pronunciamiento por escrito difundido por el Ministerio Público Fiscal de Chubut.

En su «mea culpa», aclaró que la frase se «produjo en el marco de un acuerdo de juicio abreviado cuyo objetivo fue lograr la condena de los acusados y que fue tomada con expresa y libre conformidad de la joven damnificada del caso, quien tuvo participación activa durante toda la investigación».

«Soy consciente, hoy más que nunca, de la importancia que tienen las palabras como instrumentos de cambio en la deconstrucción de estereotipos machistas», admitió.

La titular de la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), Mariela Labozzetta, afirmó que «los operadores judiciales deben ser conscientes del poder de construcción de sentido que tienen sus resoluciones y entender que en los casos de violencia de género la justificación de las decisiones debe tener en cuenta a las víctimas».

La fiscal apuntó que «cuando un operador judicial minimiza o justifica en sus resoluciones el accionar de violentos o abusadores no sólo se daña a la víctima, sino que es muy grave la sensación de impunidad que construye en la comunidad la comunicación social de esa decisión».

Miembros del Observatorio de Víctimas de Delitos dependiente de la Cámara de Diputados de la Nación repudiaron hoy los dichos de Rivarola y aseveraron que «semejante alusión raya la crueldad y la insensatez hacia la joven que padeció el crimen, su familia y la sociedad».

«Los responsables de administrar justicia deben dejar de utilizar conceptos alejados de la gente, inentendibles y que solo producen más dolor a los que tuvieron que sufrir un delito», agregaron.

Amnistía Internacional se sumó al repudio que cosechó la frase del fiscal.

«Desahogo sexual es abuso sexual, es violación, es delito», afirmó un video de la organización transmitido en su cuenta de Twitter que tuvo 1,8 millones de retweets y 2,3 mil millones de adhesiones.

La decisión generó el repudio de representantes del Poder Ejecutivo nacional, del Poder Legislativo y referentes de distintos espacios políticos, sociales y sindicales, mientras escalaron en las redes los hashtags #DesahogoSexual y #ViolaciónEnManada.