Se trata de Seguimos Educando, el plan de continuidad pedagógica para todas las escuelas cárceles de la órbita del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB). Los detenidos recibieron cuadernos con actividades para que sigan estudiando durante la cuarentena decretada por el virus Covid-19. Este proyecto en la provincia de Buenos Aires se coordina a través de dos carteras, el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y la Dirección General de Cultura y Educación.

“Las unidades penales de Magdalena dependientes del SPB y Centros de Contención de Jóvenes de La Plata dependientes del Organismo Provincial de Niñez y Adolescencia, llevan adelante lo que DGCyE ha denominado programa “Seguimos  Educando”. Es para garantizar las trayectorias educativas durante el período de suspensión de clases presenciales que se produjo por la emergencia sanitaria declarada para mitigar el avance del virus Covid-19”, aseguró a Tiempo, Marta Liliana Iovanovich, inspectora titular de Educación de Jóvenes, Adultos y Adultos Mayores del distrito La Plata con extensión en Berisso y Magdalena– Región 1.

“Queremos reconocer especialmente al cuerpo de directores, docentes, estudiantes y agradecer a las familias y referentes barriales y de organizaciones sociales que nos acompañan. Por el esfuerzo y compromiso con el que cumplen la tarea de educar” agregó Iovanovich.

La provincia repartió 28.800 ejemplares de los cuadernos para los niveles primario y secundario con el objetivo de garantizar el derecho a la educación de más de 14.000 alumnos en contexto de encierro.

Los cuadernos se distribuyeron en todos los penales de la provincia y sirven como complemento a las tareas específicas diagramadas por los docentes. “Las publicaciones tienen contenidos de lengua, matemática, ciencias sociales, ciencias naturales, educación física, artística y música. Con propuestas diarias teóricas y prácticas en el nivel primario y secundario. Además, estos cuadernillos cuentan con consejos de bioseguridad para prevenir el ingreso del Coronavirus en las cárceles”, detallaron desde la provincia.

Silvia Valdez es directora de la escuela primaria del  Complejo de Magdalena. “Nuestra escuela incluye cuatro sedes, una en la unidad 28, 35, 36 y la 51 de mujeres. Con los cuadernillos que envió Nación estamos trabajando muy bien. Tenemos una matrícula de 773 alumnos, por lo que hacer fotocopias para que le llegue la tarea a los estudiantes sería económicamente insostenible”, explicó.

Estos artículos llegaron a las celdas y pabellones a través de la Subdirección General de Educación, que depende de la Dirección General de Asistencia y Tratamiento del Servicio Penitenciario Bonaerense.

 “La educación en contexto de encierro es uno de pilares fundamentales en el tratamiento penitenciario. Trabajamos en coordinación con los ministerios de Educación de la Nación y la Provincia a fin de garantizar y asegurar el derecho de acceso a la educación de las personas privadas de la libertad”, expresó Xavier Areses, jefe del SPB.

Sin bien estos materiales educativos no reemplazan a la escuela, a las clases ni a los docentes, constituyen un canal para mantenerse en contacto con el conocimiento, las tareas y el aprendizaje. “Los cuadernos fueron entregados a lo largo de diversas reuniones con pequeños grupos de internos con el fin de respetar las recomendaciones sanitarias de los organismos internacionales de salud para evitar la expansión del virus. Durante los encuentros se les explicó a los estudiantes cuáles son los cambios y desafíos que establece esta modalidad de estudio”, aseguraron desde el gobierno bonaerense.

De esta manera se busca que los alumnos puedan completar las clases presentadas en los cuadernillos, utilizando las guías de estudio y la biblioteca con la que cuenta cada establecimiento carcelario. Las personas privadas de la libertad devuelven a los docentes las tareas resueltas para su corrección, manteniendo de esta manera una comunicación fluida en el marco de las cursadas no presenciales.

Un informe elaborado por la Dirección de Educación del SPB, al que Tiempo tuvo acceso, detalla el reparto de los cuadernillos en los doce complejos penitenciarios de la provincia de Buenos Aires: Olmos (1400), La Plata (1900), Florencio Varela (1600), Sur (500), San Martín (1100), Conurbano (800), Campana (1100), Centro Sur (1300), Norte (1600), Magdalena (1300), Este (900) y Centro Norte (900). Son 7000 cuadernillos del nivel primario y 7400 del secundario.

El Director Provincial de Políticas de Inclusión, que depende de la Subsecretaría de Política Penitenciaria del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, Marcelo Iafolla, explicó a este diario que “se van a distribuir también cuadernos diagramados por la rama de adultos de la Dirección General de Cultura y Educación  en tres niveles: para los alumnos de la primaria, de la secundaria y para los no matriculados. Para abarcar a la totalidad de las personas privadas de la libertad en el ámbito de las cárceles y alcaidías de la provincia”.

“Los cuadernos formarán parte del ciclo oficial de educación 2020 y serán evaluados por los docentes un mes después de la entrega, y todo se enmarca en el objetivo de la inclusión educativa y laboral de las personas privadas de la libertad”, indicó Iafolla.

Marcelo Fredes, es director de la escuela secundaria del Complejo Conurbano Norte San Martín, donde funcionan las unidades 46, 47 y 48. Explicó que el proyecto “es para darle continuidad a contenidos mínimos que tenemos que desarrollar durante todo el año en las escuelas. Necesitamos dar respuesta sobre el servicio educativo que brindamos. Buscamos la forma de sobrellevar la situación y empezamos a usar la virtualidad y los cuadernos son de gran ayuda”, concluyó.