La Cámara de Apelaciones de San Martín excarceló a Paola Elvira Córdoba, la mujer acusada de haber matado a su esposo, Alberto Elvio Naiaretti, de 185 puñaladas en el partido bonaerense de José C. Paz el 9 de marzo. Días atrás, la hija de la imputada había recuperado también su libertad. Se cree que el hombre de 46 años fue asesinado luego de someter a toda su familia a una extrema violencia.

Organizaciones feministas, familiares y allegados de Paola y su hija Milagros se congregaron desde temprano en los tribunales de avenida Ricardo Balbín al 1700 en San Martín. Cerca del mediodía, los jueces de la Sala I de la Cámara ordenaron la excarcelación de Paola al considerar que la imputada no evadirá a la Justicia y que tanto ella como su familia se encontraban «sometidas a una sistemática violencia de toda índole» por parte del fallecido.

Finalmente, los jueces Carlos Hermelo, Javier Mariani y Patricia Toscano concedieron por unanimidad la «excarcelación extraordinaria» que le había otorgado el Juzgado de Garantías pese a que la fiscalía se había opuesto. El fallo de 12 páginas se concretó luego de una audiencia personal entre Paola y los jueces. «Ha quedado evidenciado a mi entender que no solo la imputada Córdoba se encontraba sometida a una sistemática violencia de toda índole por parte de su esposo sino que todo el grupo familiar padecía la irascibilidad de la víctima de estos actuados», explicó en su voto el juez Hermelo, al que adhirieron sus pares.

El magistrado valoró la resolución del juez de garantías 4, Alberto Brizuela, quien había dispuesto las excarcelaciones de la mujer y su hija Paula Milagros Naiaretti, de 18 años, pero la fiscal de la causa, Silvia González Bazzani apeló esa decisión, ante la posibilidad de que se fuguen debido a la expectativa de pena que tiene el delito que se les imputa en un futuro juicio oral.

«Debo destacar la sabia decisión del juez garante de imponerle obligaciones especiales a la causante consistentes en no salir del domicilio ofrecido para la medida durante los primeros treinta días (…) lo que posibilitará que en dicho lapso el Ministerio Público logre en avanzar con la investigación sin riesgo alguno de que su labor sea entorpecida», señaló en el escrito.

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El juez Hermelo añadió que «desde el inicio de estas actuaciones se ha verificado que la encartada no ofreció resistencia alguna a su aprehensión» y puso en duda la hipótesis de la fiscalía respecto a que el «hecho de demorar horas en comunicarse con el sistema 911 pueda ser tomado como una pauta de riesgo dada la posibilidad de modificar la escena del crimen».

«Córdoba fue muy clara al sostener que refirió a su hija que no llamaría a una ambulancia porque no quería que lo reanimen a Naiaretti, que tenía miedo, de que éste se levantara y agrediera a toda la familia», indicó. Por último, el magistrado resaltó «la buena impresión personal que Paola» le causó en la audiencia de conocimiento con el Tribunal. «Me ha quedado evidenciada una vez más el alto grado de afectación de la violencia padecida durante largos años por parte de la víctima de autos», dijo Hermelo.

El último jueves por la noche fue liberada la hija de Córdoba, quien fue excarcelada desde la alcaidía departamental de La Plata, donde permanecía detenida junto a su madre por el crimen de Naiaretti. La medida se concretó luego que la fiscal general adjunta de San Martín, Mercedes Rubio, desistiera de apelar la excarcelación que había dictado el juez Brizuela. Sin embargo, Córdoba continuó detenida ya que Rubio decidió apoyar el recurso presentado por la fiscal González Bazzani, que consideró que el contexto de violencia de género que padecían madre e hija no «justifica» el crimen y puso en duda las situaciones denunciadas por ambas.

Naiaretti fue hallado asesinado el 9 de marzo último en su casa de 18 de Octubre 889 de José C. Paz, y la esposa y la hija fueron detenidas por el crimen y confesaron ante la justicia haberlo asesinado porque hace años eran víctimas de violencia intrafamiliar.