Uno de los reclamos más fuerte de la comunidad educativa porteña es la falta de diálogo de las autoridades gubernamentales. Ese pedido resultó ser una de las exigencias fundamentales que motorizó la toma de escuelas: «La ministra jamás nos recibió y no quiere hablar con nosotros», denunciaron en reiteradas ocasiones las y los estudiantes. «Acá llegamos por la violencia de Soledad Acuña y por negarse a escucharnos», exclamaron el lunes de la semana pasada cuando comenzaban las tomas masivas de escuelas. Pero la negativa a dialogar sobre educación se extiende a todos los órdenes institucionales, una clara decisión política que “de esto no se habla”.

Se cumplieron 90 días que el oficialismo porteño cerró ‘bajo siete llaves’ la comisión de Educación y no volvió a convocar a sus integrantes, ni a referentes del sector. La presidenta de éste órgano, Manuela Thourte, de la UCR Evolución e integrante de Juntos por el Cambio, es quien debería arbitrar los medios necesarios para que, al menos, uno de los poderes del Estado porteño reciba a estudiantes, referentes educativos y legisladores y legisladoras en una reunión institucional, en medio de la crisis educativa porteña.

“La comisión de Educación no se reúne desde el 5 de julio en la legislatura porteña. Pareciera que no hay conflictos en la Ciudad de Buenos Aires, sin embargo, hay una comunidad educativa que viene diciendo basta”, señaló a Tiempo la diputada porteña Maru Bielli, vicepresidenta de la Comisión de Educación. Para la socióloga, docente y militante social especializada en educación, son varios los temas que debería tratar la comisión educativa que se niega a abrir sus puertas. Garantizar los derechos laborales y el acceso a la salud de docentes, además quedó demostrado “que los estudiantes vienen haciendo demandas muy claras sin haber sido escuchados en distintas instancias de diálogo con intentaron con una gestión, que de manera sistemática se niega a escuchar”. En la última comisión de Educación realizada el 5 de julio, la legislatura escuchó los reclamos de más de 200 escuelas con problemas de calefacción en medio del invierno y las pésimas condiciones en infraestructura escolar. También recibió a integrantes de la comunidad de educación especial, que manifestaron su preocupación frente al ajuste en ese sector que dejó afuera de las escuelas a los estudiantes mayores de 22 años y sobre la quita del Palacio Ceci a estudiantes con discapacidad; y también recibió a docentes para dialogar sobre el proyecto proyecto de titularizaciones que el oficialismo se niega a tratar, en el contexto de una cifra alarmante: en la Ciudad de Buenos Aires hay más de 35 mil docentes que están precarizados.

Este miércoles, sin la presencia de Juntos por el Cambio, la vicepresidenta de la comisión de Educación, Maru Bielli, se reunión con estudiantes, docentes y familias de la comunidad educativa del nivel secundario.

“Qué importante sería que Soledad Acuña intente escuchar las demandas y nutrirse del saber de aquellos y aquellas que habitan el aula, creen en la escuela pública y la defienden”, publicó en sus redes la diputada porteña.

Pedido de interpelación a Soledad Acuña

Hace una semana que la oposición en la Legislatura porteña, presentó un pedido para interpelar a la titular de la cartera educativa, Soledad Acuña. El pedido de citación fue presentado por el Frente de Todos, con el objetivo que rinda cuentas respecto de “las problemáticas actuales del sistema educativo” en el distrito y de “las acciones llevadas adelante” frente al “conflicto estudiantil” por el cual permanecen escuelas tomadas. La iniciativa se suma a la impulsada por el PTS en el Frente de Izquierda para interpelar a la funcionaria “respecto a la denuncias penales, reclamos económicos millonarios y hostigamiento a las y los estudiantes secundarios y sus familias».
En ese marco, ambas bancadas que integran el arco opositor porteño solicitaron que sea convocada la Comisión de Educación, que preside la legisladora de la UCR-Evolución Manuela Thourte, “teniendo en cuenta que la última reunión se desarrolló el 5 de julio pasado”, argumentaron. “Consideramos que existen diversas problemáticas que atañen al sistema educativo de la Ciudad y que los sucesos ocurridos en los últimos días vinculados al conflicto que involucra a estudiantes de escuelas secundarias requiere el tratamiento del expediente que solicita la citación a la ministra”, indicaron.