La Escuela Interdisciplinaria de Altos Estudios Sociales (IDAES) inauguró una Dirección en Justicia y Derechos Humanos. La conducción será de Waldemar Cubilla, licenciado en sociología y militante de la Biblioteca Popular La Carcova de José León Suárez. Es la primera vez que la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) pone a cargo de un dispositivo de esta magnitud a una persona que estuvo presa y se graduó en libertad.

Durante la presentación estuvieron presentes el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, el subsecretario de la provincia de Buenos Aires, Matías Moreno, acompañados por el decano del IDAES Ariel Wilkis y un panel de expositores que hicieron al evento en el aula Tanque del Campus Miguelete.

“Como muchos, considero que este nombramiento de la Universidad es en reconocimiento al valor de la trayectoria y a la militancia en materia de justicia y derechos humanos”, expresó Waldemar a Tiempo. Contó que es una experiencia que nació en la sede CUSAM que la UNSAM fundó en la unidad 48 de José León Suárez.

Se trata de un trabajo colectivo sostenido desde hace más de trece años en todo el territorio sanmartinense a través del Centro de Justicia Comunitaria de la Mesa del Área Reconquista que funciona en la Biblioteca Popular La Carcova y que ahora alcanza institucionalidad universitaria. Además, Waldemar profundizó en que “esta nueva dirección promete un nuevo saber que es elaborado a través de la práctica y la experiencia”.

“El programa busca la construcción de datos para la producción del conocimiento en base al recorrido que ya venimos haciendo” contó Waldemar. Señaló que le preocupa la “tendencia que hay por parte de algunos organismos estatales en delegar la cuestión de la reinserción social de las personas liberadas o de quienes aún están en las cárceles”.

Respecto al concepto de persona liberada dijo: “Siempre lo pongo en cuestión a ese concepto, o sujeto político al que llaman liberado”. Siguió explicando que en “esto hay algo filosófico, lo digo por la pregunta de hasta cuándo uno es liberado desde el momento que recupera la libertad”. Continuó contando que le parece que “ahí hay algo que no se puede evitar, es una condición de vida, pero la militancia sobrepasa esa condición”. Ahondó en que “esta responsabilidad no debe caer sobre las organizaciones sociales: sino en las organizaciones gubernamentales competentes”.

“Creo que es el momento de poder pensar una nueva institucionalidad que aborde cuestiones de la problemática sobre la prevención del delito y la disminución de la reincidencia”, subrayó Waldemar. También remarcó que “hasta me atrevería a anunciar la necesidad que existe de crear un ministerio de preservación de la libertad que abarque puntualmente tres dimensiones, una en la prevención del delito, otra de disminución de la reincidencia y la tercera mientras la persona transita el encierro”.

El programa

La Dirección de Justicia y Derechos Humanos fue presentada la semana pasada en el aula Tanque de la Universidad Nacional de San Martín. Como muchos de los proyectos que la UNSAM tiene en el territorio sanmartinense, busca complementar saberes teóricos con los que fueron adquiridos a través de la práctica y la experiencia. También será formadora en la construcción de políticas de Memoria, Verdad y Justicia con las juventudes.

La co-dirección del programa está a cargo de Florencia Brescia, licenciada en comunicación de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Se decidió y estableció así para que se complementen los saberes y disciplinas de las distintas Casas de Altos Estudios y las experiencias de la militancia que Florencia realiza con Waldemar en el territorio.