Mientras Ómicron sigue generando cifras récord de contavios de Covid-19 en todo el mundo, una nueva variante suma preocupación. Fue detectada por investigadores de la Universidad de Aix-Marsella, en Francia. Presenta 46 mutaciones y 37 deleciones. Por el momento, fue denominada B.1.640.2 o IHU.

Esta variante fue identificada a principios de diciembre: el primer caso sería de una persona que llegaba a Francia desde Camerún.

El equipo de científicos que descubrió la nueva variante, encabezado por Philippe Colson, indicó que las pruebas realizadas hasta ahora mostraron mutaciones con «combinación atípica».

Los especialistas aclararon que «estas observaciones muestran una vez más lo poco predecible que es la aparición de nuevas variantes del SARS-CoV-2 y su introducción desde el extranjero y ejemplifican la dificultad de controlar dicha introducción y posterior propagación».

La investigación –que aún no fue publicada en una revista académica pero figura en el portal medRxiv, donde se presentan los estudios científicos a la espera de ser revisados por pares- muestra el resultado del análisis a 12 pacientes contagiados de Covid-19 en la ciudad de Forcalquier, en el sur de Francia.

De acuerdo con el estudio, esta variante es un «pariente lejano» de Ómicron. Las primeras pruebas muestran que porta la mutación E484K, que podría tornarla más resistente a las vacunas, y la mutación N501Y, que se vio por primera vez en la variante Alfa y podría hacerla más transmisible.