El Tribunal Oral Criminal Nº1 condenó a Luis Gómez a cadena perpetua por el crimen de Brian Aguinaco, un adolescente de 14 años que fue baleado en el Bajo Flores en diciembre de 2016. El hombre, de 28 años, era quien manejaba la moto desde la que partieron los disparos que mataron al joven y fue hallado culpable del delito de homicidio criminis causa: matar para ocultar otro crimen.

Gómez fue condenado a perpetua “por ser coautor del delito de robo con uso de arma de fuego en concurso real con homicidio criminis causa”. En tanto, el acusado de haber disparado contra Aguinaco no fue juzgado: al momento del crimen era menor de edad y fue deportado a Perú. Durante la lectura del veredicto se produjo un incidente entre ambas partes, cuando la familia de Gómez se burló de la muerte de Brian.

Aguinaco fue baleado cerca de las 15 del sábado 24 de diciembre de 2016, en la esquina de Rivera Indarte y Asamblea, a pocas cuadras del acceso a la villa 1-11-14. Aquel día, dos mujeres fueron asaltadas por dos hombres que viajaban en una moto: mientras las víctimas forcejeaban con los asaltantes apareció un auto que intentó impedir el robo. Al volante estaba Enrique Aguinaco, de 69 años, quien estaba acompañado por su nieto Brian y comenzó a perseguir a los ladrones, que respondieron con disparos.

El adolescente recibió un tiro en  el rostro y fue trasladado por su abuelo al hospital Piñero, donde ingresó en grave estado. Luego fue derivado al hospital de niños Ricardo Gutiérrez, donde falleció dos días después.

Tras conocer el veredicto, Eliana, la madre del joven asesinado, se mostró muy conforme: «Los jueces dieron un gran ejemplo. Teníamos miedo y no lo esperábamos, pero es ejemplar lo que hicieron». Visiblemente conmovida, la mujer agregó que ella y su marido están «tranquilos» y cerró: «Esta es una etapa terminada y que duele. Nosotros queremos que Brian esté en paz, que no se lo nombre más».

Por su parte, el abuelo de Aguinaco, Enrique, quien estaba con él en el momento del crimen, dijo estar «conforme» con la condena: «Ojalá que se siga haciendo justicia así. Me siento un poco más aliviado, es tremendo lo que yo siento adentro», expresó entre lágrimas.

En tanto, el padre de Brian, Fernando, consideró que con el fallo los magistrados «demostraron que la justicia existe», y que ahora Gómez «se tiene que hacer cargo y pagar lo que tenga que pagar».