Fueron trabajadoras dependientes del Hospital Grierson las que lo detectaron: ecografías firmadas por el mismo profesional que había sido denunciado por abuso sexual cuando estaba en el Piñero. Así supieron que no sólo había concursado y había obtenido un nuevo cargo, sino que había vuelto a atender pacientes. Apenas lo detectaron, advirtieron a las autoridades en diciembre del año pasado. Más de medio años después, sigue haciendo ecografías.

“Horacio Rodríguez Larreta sacó un decreto en el medio de la pandemia declarando hospital al Grierson, aunque no tiene esa estructura y aún está en obra. Ahí él concursa. Prácticamente es la misma zona, en la Comuna 8. Nosotras pasamos a depender del Grierson, antes éramos del Piñero. Por eso ya sabíamos su nombre. Empezamos a ver ecografías firmadas por él y ahí nos enteramos que estaba en funciones”, contó a Tiempo una de las trabajadoras, que prefiere mantener su identidad en reserva. “Avisamos a Defensoría del Pueblo y a Gabriel Battistella (subsecretario de Atención Primaria de la Salud del Gobierno de la Ciudad). Siempre nos dijeron ‘sí, estamos al tanto, lo vamos a ver’ desde diciembre 2020”, relató la trabajadora, y advirtió que ya hubo “situaciones de violencia hacia nosotras” por decir que las autoridades del hospital “son cómplices; el director dice que no sabían nada y ahora supuestamente no está atendiendo mujeres, pero no es la respuesta: no se trata de cuerpos femeninos solamente los que pueden ser abusados”.

Ante la consulta de este diario, Battistella respondió que “se están haciendo todas las averiguaciones. El tema es que la denuncia fue indirecta, por eso no saltó en el legajo cuando concursó en Grierson. Se volvió a analizar todo eso, está trabajando la Dirección de Recursos Humanos, que hace los concursos, con el director para ver qué respuesta se va a dar a esta situación”.

María Elena Naddeo, titular del Programa de Atención de Niñez Adolescencia y Género de la Defensoría del Pueblo, cuestionó la falta de protocolos sobre violencia de género en el ámbito sanitario porteño y advirtió que el antecedente “debería haber saltado en Recursos Humanos del Ministerio de Salud. Y el Grierson debió haber preguntado a Salud. Ahí hay una falla de articulación: si no consultaron es grave, y si el sumario del Piñero no fue incorporado al legajo, también es grave. Estamos investigando qué ocurrió, pero más allá de eso pedimos que cese de ejercer con pacientes, en todo caso que haga tareas administrativas mientras tanto, pero además debería ser separado de su cargo y sancionado”.

En medio del proceso para exigir que se tomen medidas, las trabajadoras y la Defensoría se enteraron de dos denuncias en el ámbito judicial contra el mismo profesional, además de las tres mujeres que contaron el acoso que sufrieron en el Piñero. Una está radicada en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 13, la otra en el 52. Son de 2019 y 2020 respectivamente. Es decir, cuando ya se estaban visibilizando los casos en el Piñero.

“Esto empezó con denuncias hace dos años. A partir de las denuncias de varias pacientes sobre acoso sexual mientras se hacían las ecografías, se le inició un sumario y se lo suspendió en el Piñero. Estábamos haciendo un seguimiento del sumario, nunca pensamos que iba a concursar en otro lugar y que el Ministerio de Salud le iba a permitir asumir. Y es una conducta irregular presentarse a concurso teniendo sumario y traslado preventivo, es reprochable”, consideró Naddeo. Añadió que desde la Defensoría recibieron denuncias por casos semejantes en el ámbito privado, de clínicas y consultorios. “No son muy numerosas. Creo que son situaciones excepcionales, pero marcan un problema muy grave que hay que saber detectar a tiempo. En este caso estaba detectado, lo terrible es que se haya vuelto a producir y que haya vuelto a tener un cargo”.

“Siempre las excusas son que no hay denuncias en la Justicia, que no hay pruebas. Lo típico en estos casos. Las tres mujeres de 2019 no quisieron denunciar penalmente; eran mujeres de la 1-11-14 y la Villa 20, otra de Provincia de Buenos Aires. Lo comunicaron al equipo profesional. Una fue a la Defensoría del Pueblo y lo relató ahí, eso está en el expediente. Los tres casos son iguales sobre el accionar de esta persona, y nos enteramos de dos denuncias penales pero no de personas que conozcamos”, dijo una de las trabajadoras del Grierson. Y aclaró: “No estamos haciendo medidas de escrache hacia él, escuchamos en el consultorio relatos de abuso con acceso carnal y en ese marco pedimos medidas de resguardo hacia el resto de las usuarias para evitar que siga sucediendo”. Con este objetivo, realizarán este viernes una concentración frente al hospital, a las 10. El lema es “sin cómplices no hay abuso: el silencio no es salud”.

“El pedido es a los funcionarios, exigiendo medidas serias y reales y que dejen de usar traslados para tapar y seguir encubriendo a estas personas. Porque además no hay protocolos serios sobre qué hacer ante estas situaciones, entonces sin denuncia penal no hacen nada. Tampoco pedimos que lo despidan. Que lo pongan en tareas pasivas, que le den tareas administrativas, capacitación, atención psicológica para desarmar esa práctica que sucede en el consultorio. No se tomó ninguna medida. En el Piñero se tomó la decisión de que no atienda personas y tiene sumario administrativo, ¿cómo puede ser que pase a atender en otro lugar? Eso da cuenta de que no hay una medida más estructural porque no está la decisión política”, concluyó una de las trabajadoras del hospital.