Imponente, de color gris templado y ubicado en una de las esquinas más anheladas por los especuladores inmobiliarios. En el lugar funciona la sede de la Comuna 14, el registro civil y varias dependencias judiciales de la Ciudad. La intersección de Coronel Díaz y Beruti dejó de pertenecer a un bien del Estado y pasó a manos privadas. Más precisamente en manos del grupo IRSA, uno de los aportantes más relevantes de la campaña del PRO, local y nacional.

El inmueble tiene 8.475 m2 de superficie y si bien el precio de base fue de 20 millones de dólares pero luego de una puja entre dos oferentes, el precio final terminó siendo de 20 millones 100 mil dólares.

Si bien la cifra es un monto exorbitante, en ese lugar el metro cuadrado está por arriba de los 4 mil dólares, pero quien accedió a la compra del edificio público de Beruti lo consiguió a la mitad: USD 2.372. A esto se le suma que el pago se debe realizar al cambio oficial, es decir: IRSA lo pagará a mitad de su valor, USD 1.186, una cifra irrisoria para el mercado. Más de un 50% más barato. Traducido a pesos representa 252 mil por metro cuadrado cuando en la zona supera los 459 mil pesos el m2.

“El gobierno de Larreta sigue favoreciendo con distintos negocios a IRSA, y eso implica que el jefe de gobierno está buscando financiamiento para su carrera presidencial”, señala a Tiempo el titular del Observatorio del Derecho a la Ciudad, Jonatan Baldiviezo. El edifico iba a subastarse el pasado 15 de diciembre, pero hubo pocos interesados en participar del remate y el gobierno de la Ciudad decidió finalmente cambiar la fecha. En primera instancia se prorrogó para el pasado 12 de enero y luego para este viernes 18.

Hace aproximadamente 25 años hubo un intento de compra de ese edifico por parte de Elsztain, titular de IRSA, donde ofreció poco más de 4 millones de dólares, 16 millones menos que lo ofertado durante la jornada de hoy. La propuesta fue tan escandalosa que no llego a buen puerto y terminó con el procesamiento de Jorge Domínguez, por aquel entonces intendente de la Ciudad de Buenos Aires. El edificio tiene una planta baja, seis pisos y un subsuelo y por la normativa actual se pueden construir en ese lote hasta 22,80 metros de altura y dos retiros. Un negocio que quintuplicaría el valor de compra para cualquier especulador inmobiliario

“Más allá de las ambiciones presidenciales de Rodríguez Larreta, uno no entiende cómo pone en juego los bienes público de esa forma sin sufrir ninguna consecuencia, al igual que lo hizo con costa urbana y Ciudad Palmera en Caballito”, agrega Baldiviezo. Cabe destacar que el edificio se encuentra frente al Alto Palermo Shopping, otra infraestructura inmobiliaria que pertenece al grupo IRSA

Negocios y más negocios

La entrega del edificio público al grupo IRSA se realizó en la misma jornada que su titular, Eduardo Elsztain, lanzó a través de su grupo inversor, un fondo de inversión en pesos para aprovechar el piso histórico de la moneda. Afirmó que esta iniciativa  “es una muestra de la fe” que tiene “en la recuperación” de la economía argentina. Se trata del Toronto Trust Argentina 2021, un instrumento de inversión armado por el Banco Hipotecario, el de Crédito y Securitización (BACS) y la consultora Asset Management, integrantes del grupo que encabeza Elsztain. “El valor del peso en términos reales está en mínimos históricos y debería estar comenzando un ciclo alcista”, afirmó.