En el tramo final de la campaña, con varios sondeos favoreciendo al candidato del correísmo y un alto número de votos nulos y en blanco, los binomios presidenciales Andrés Arauz-Carlos Rabascall (Unes) y Guillermo Lasso-Alfredo Borrero (Creo) llegan al balotaje de hoy en Ecuador con señales claras de cuál es el universo que representan. Con una sociedad polarizada, signo de los tiempos en la región, y acaso en gran parte del mundo Occidental, los candidatos lograron visibilizar sus bien diferenciadas propuestas. La de un Estado soberano interviniendo en la Economía o la del libre mercado y el alineamiento al poder económico internacional. Las miradas regionales están puestas en este proceso que replica la disputa entre gobiernos populares y conservadores y que puede consolidar la tendencia retomada por Bolivia y Argentina.

Y de alguna manera se fue dejando un poco de lado el debate sobre cuestiones personales profundizado por la propagación de noticias falsas y difamaciones varias. No ajeno a este recurso fue el desembarco de Jaime Durán Barba al diseño publicitario electoral de Lasso.

Lejos de ser aquel “perfecto desconocido” que recibía el espaldarazo del ex presidente Rafael Correa, el joven economista de 36 años y exfuncionario del Banco Central llegó a su último acto proselitista del jueves, en Manabí, con encuestas que en su mayoría (14 de 17) lo dan ganador con una intención de voto que ronda los 40 puntos.

Con una marcada reivindicación de su mentor político, Arauz prometió retomar con «transformaciones y mejoras» el rumbo trazado durante el correísmo y que Lenin Moreno suponía continuar si no hubiese traicionado el programa de la “Revolución Ciudadana”.

“Vamos a corregir errores y sumar a todos los sectores sociales en un nuevo bloque progresista”, dijo en el cierre. Frente a la crisis económica que vive su país, hay alta expectativa por la audaz promesa de campaña de entregar 1000 dólares a 1000 familias afectadas por la pandemia.

Manifestó que piensa renegociar con el FMI el préstamo de 6.500 millones de dólares y que resistirá el plan de austeridad que supone. “Buscaremos que no se aplique la reducción de gasto público a una velocidad tan tremenda como está planteado ese acuerdo, queremos que se respete la Constitución de Ecuador con relación al Banco Central (que según Arauz pretende ser privatizado) y plantearemos que los dólares deben preservarse en Ecuador para que haya mayor actividad económica”, señaló.

La situación sanitaria no fue excepción en el cierre de campaña. Sobre todo porque la declaración del Estado de Excepción por parte del gobierno, que llegando al fin de semana fue levantado por la Corte Constitucional, hizo sospechar a los correístas de esconder un intento de fraguar el acto eleccionario. “Tenemos que cuidar cada uno de esos votos no podemos permitir que nos roben el triunfo”, agitó Arauz en el cierre. Lo mismo hizo Correa, a través de un video enviado al acto central (ver aparte).

En la otra vereda, el banquero de derecha y miembro del Opus Dei, Guillermo Lasso, también cerró su campaña el jueves en Guayaquil, llamando a los votantes a unirse “por el cambio”. Más allá del eslogan, su propuesta no es novedosa. Lasso es un defensor a ultranza del libre mercado y enemigo de la intervención estatal. «Cada vez que el Estado se mete en la vida de los ecuatorianos, la complica. Yo quiero que todos tengan la libertad para emprender y hacer sus sueños realidad con menos impuestos y trámites, más inversión y una economía abierta al mundo», tuiteó durante esta última semana.

En recientes entrevistas aseguró que su relación con el FMI será “excelente no sólo con el Fondo sino con el Banco Mundial, con el BID, con la CAF porque el Ecuador es un país pequeño que se encuentra en crisis y que necesita la ayuda de todos los gobiernos y de todos los organismos multilaterales de crédito” y dejó en claro su política fiscal: “Si queremos solucionar el problema de la deuda, tenemos que administrar bien la economía, apuntar en el mediano plazo a déficit cero para no tomar más deuda”.

El escenario electoral se termina de complejizar con un alto índice de votos nulos, en blanco o indecisos que van del 20% al 30%. Estos se estarían concentrando en los votantes de Yaku Pérez, quien obtuvo el 19,4% en la primera vuelta, apenas detrás de Lasso, y llamó a anular el sufragio, aunque una parte del movimiento Pachakutik que lidera ya se pronunció a favor de Arauz. El otro sector vacante es el que votó a Xavier Hervas (15,7%), de Izquierda Democrática. El excandidato manifestó su apoyo a Lasso, pero se estima que parte de sus votantes, más volcados hacia el progresismo, no lo seguirán.


Correa se metió de lleno en la campaña

“La Patria vuelve para su pueblo y vuelve también para la Patria Grande”. Con esas palabras, el expresidente Rafael Correa saludó la candidatura de su antiguo asesor en un video emitido durante el acto de cierre de campaña. La vuelta a un proceso de integración de países con gobiernos populares es uno de los puntos centrales que se debaten a nivel regional este domingo y un triunfo del correísmo en Ecuador puede reforzar una tendencia que ya se viene dando con los triunfos electorales en Argentina y Bolivia y el proceso constituyente en Chile. “Retomaremos la senda de prosperidad, justicia y dignidad que seguimos durante diez años. Siempre nuestra prioridad principal serán los más pobres, los descartables, como llama el Papa Francisco”, afirmó. También se refirió a las persecuciones que vivieron los exfuncionarios de su gobierno, incluido él mismo, exiliado forzosamente en Bélgica por causas abiertas en su contra. “También esta vez lo haremos por los perseguidos, por los encarcelados, especialmente por la mayor víctima de la persecución y el odio del peor gobierno de la historia (el de Moreno), me refieron a nuestro compañero Jorge Glas”, dijo.

Correa recordó todas las trabas que se impusieron para que él fuera candidato. Hasta se prohibió en la campaña la utilización de su imagen, su voz y su nombre. Pero afirmó: “A lo único que lograron condenarnos con nuestra persecución es a la victoria”.

Quién es quién

ALIANZA UNES

Andrés David Aráuz Galarza. Nació en Quito, Ecuador, el 6 de febrero de 1985.

Master en Cs. Económicas en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales. Licenciado en Cs. Económicas, de la University of Michican. Fue asesor en Política Financiera del gobierno (2007- 2009), en el banco Central de Ecuador (director general 2011-13). Subsecretario de Planificación del Buen Vivir (2013-15). Durante el gobierno de Rafael Correa, fue ministro de Conocimiento de Talento Humano y Talento Humano (2015) y de Cultura (2017).

Vice: Carlos Xavier Rabascall. Nació en Guayaquil, el 3 de septiembre de 1960. Periodista e ingeniero comercial.

CREO

Guillermo Alberto Santiago Lasso

Nació en Guayaquil el 16 de noviembre de 1955. Casado. 5 hijos.

Educado en “Hermanos de las Escuelas Cristianas” (primaria y secundaria). No posee título terciario. Candidato presidencial en 2013 y 2017 (fue superado en balotaje por Lenin Moreno, por el 2,3 por ciento. Luego fue designado superministro de Economía. Fue embajador itinerante de Luicio Gutiérrez (2003/2005) y presidente de la Fundación Terrestre de Guayaquil. Presidió el Banco de Guayaquil, donde desarrolló la mayor parte de su carrera privada.

Vice: Alfredo Borrero Vega, nació en Cuenca en junio de 1955, pero vive en Quito hace más de 30. Médico y neurocirujano. Fue decano general de la Facultad de Ciencias de la Salud.