Una delegación estadounidense visitará México el próximo miércoles para discutir el reclamo del gobierno mexicano de que Washington no excluya a ningún país de la Cumbre de las Américas, informó este lunes el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Previo a esa visita, el tema será abordado este lunes en un diálogo telefónico por el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, y el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, señaló el mandatario en su habitual rueda de prensa mañanera.

«Viene una comisión de los organizadores de la cumbre y los vamos a recibir con mucho gusto, vamos a exponer por qué consideramos que debemos unirnos todos y que es un momento estelar», afirmó López Obrador.

AMLO había asegurado que no participará de la cita hemisférica, que se celebra del 6 al 10 de junio en la ciudad de Los Ángeles, si Estados Unidos finalmente decide excluir a algún país.

«Yo no iría porque pienso que necesitamos la unidad de América, y ya es tiempo de los hechos. Hechos, no palabras», insistió.

A principios de mayo, el jefe de la diplomacia de Estados Unidos para las Américas, Brian Nichols, afirmó que espera que Cuba, Nicaragua y Venezuela no estén en la cumbre por considerar que “no respetan los preceptos democráticos”.

El presidente mexicano indicó que la Casa Blanca aún no ha girado las invitaciones, por lo que espera que su homólogo estadounidense, Joe Biden, finalmente convoque a todas las naciones.

López Obrador y su par boliviano, Luis Arce, se sumaron la semana pasada a los países de la Comunidad del Caribe (Caricom), que manifestaron la decisión de no asistir al cónclave si se excluía a Cuba, Venezuela y Nicaragua.

El presidente Alberto Fernández y la hondureña Xiomara Castro también pidieron no dejar a ningún país de las Américas fuera de la cita, pero no condicionaron su asistencia a esa decisión.

La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que se encuentra bajo la presidencia pro témpore de la Argentina, llamó también a que no haya exclusiones «que impidan que todas las voces del hemisferio dialoguen y sean escuchadas».

La Cumbre de las Américas, que en junio celebra su novena edición, se da en el marco de la OEA, de la que Nicaragua anunció su salida el año pasado, tras lo cual cerró las oficinas del organismo en Managua. De todas formas, el proceso de salida lleva unos dos años.

Venezuela, por su parte, se retiró en 2019 del organismo regional y Cuba no es miembro activo, aunque fue invitada por primera vez a la cumbre de Panamá en 2015, en medio del deshielo impulsado por el presidente estadounidense Barack Obama con la isla, y volvió a estar en la de Lima en 2018.

La IX Cumbre de las Américas será la segunda organizada por Estados Unidos después de la edición original en Miami en 1994 y pondrá énfasis en las migraciones forzosas, el cambio climático, la Covid-19 y la «lucha por la libertad y la democracia», según la Casa Blanca.

Evo propone que Bolivia se retire de la OEA

El expresidente de Bolivia Evo Morales planteó este domingo que Bolivia se retire de la Organización de Estados Americanos (OEA) si finalmente Estados Unidos excluye a Cuba, Venezuela y Nicaragua de la Cumbre de las Américas.

“Frente a la exclusión de Estados Unidos de países liberados de su hegemonía, qué bueno sería que Bolivia se retire de la OEA (…), sería el mejor aporte de nuestro gobierno a la independencia del Estado, dignidad, libertad e identidad del pueblo boliviano”, afirmó el exmandatario durante el programa “Evo es pueblo líder de los humildes” emitido por Radio Kawsachun Coca.

Las declaraciones de Morales surgen después que el presidente Luis Arce anunciara el pasado 11 de mayo que no participará del evento internacional si la Casa Blanca “excluye a países hermanos”.

Además, el líder cocalero consideró que Nicaragua, Venezuela y Cuba son “países democráticos” y cuestionó la decisión de Estados Unidos de apartarlos de la Cumbre de Las Américas que organiza el país del norte.

“Debería decir (Estados Unidos que) ‘países que no respetan al imperio, países que no se someten al imperio, no pueden participar en la cumbre’. Estados Unidos tiene doble moral, habla de democracia y no respeta a los países”, señaló.